lunes, 26 de diciembre de 2016

LOGOS
2016-2017
LO PÚBLICO, JAMÁS SERÁ PRIVADO
        "... para no ser esclavos martirizados del tiempo que nos hunde los hombros y nos inclina hacia la tierra...",  Charles Pierre Baudelaire (1821-1867), uno de los poetas malditos de la bohemia francesa, tan lleno de excesos, nos sugiere que estemos siempre en embriaguez.
        Según sus conceptos literarios debemos embriagarnos "de vino, de virtud, de poesía, o de lo que te plazca"; es decir, podemos embriagarnos, por ejemplo, de trabajo, talento, amor, respeto, dignidad, o de lo que deseemos.
        En el fondo, lo que nos propone Baudelaire es que seamos dionisiacos, y no apolíneos, para no ser prisioneros del tiempo.
        Y el tiempo es, físicamente, una cualidad de toda materia; la que puede ser analizada y vivida desde infinidad de perspectivas.
        Los seres humanos como materia física, química, psicológica, económica, política, social o individual, saben ser esclavos martirizados del tiempo; empero, también, pueden hacer de éste una herramienta eficaz o un valioso instrumento que sea nuestro útil y no nuestro cruel negrero.
        El tiempo no es una cualidad pura y aislada, sino que está revuelta con el espacio, circunstancia, cantidad, modo, forma, interés, odio, cariño, admiración, respeto, y un sin fin de cosas de índoles tan diversas; además de que, a veces, para bien, nos conviene ser apolíneos, y en ocasiones dionisiacos.
        Ejemplificaré con dos humanos: Carlos Slim y Donald Trump, y con dos tiempos establecidos como "años" por la conciencia humana: 2016 y 2017; en éstos, ambos empresarios exitosos son propietarios de inmensas fortunas.
        Antes, Carlos de 76 años de edad y Donald de 70 no habían sido políticos militantes en el campo electoral. Mexicano el primero y estadunidense el segundo están, con su respectiva riqueza, vinculados con la política y los políticos.
        Trump en el 2016 logra ser Presidente electo de los EU, careciendo de antecedentes gubernativos, y ante el recelo sorpresivo y temeroso de la mayor parte de los habitantes del planeta.
        Militante activo de esa desconfianza lo fue Slim: "De ganar Trump crearía un desequilibrio económico en los EU y en el mundo... Es distinto ser borracho que cantinero".
        Donald durante su campaña denunció a Carlos: "Es extranjero en EU, y a su vez donante y orquestador en el equipo de Hillary Clinton".
        Ese desencuentro dionisiaco en 2016 con sus circunstancias parecía definitivo entre esos millonarios; pero lo que impera en esas grandes ligas es: money, money, money.
        Por esa simple razón Slim y Trump se reunieron y se entendieron apolíneamente, ojalá no sólo para bien de ellos; aunque la unión de los poderosos suele hacer monopolios económicos y políticos llenos de complicidad y de peligro.
        No es sano que el poder económico y el político se le entreguen a una persona, o a dos o más, es urgente crearles contrapesos, ya que estos poderes no son privados, son públicos y jamás dejarán de serlo. Son bienes de todos y de cada uno de los humanos.

domingo, 18 de diciembre de 2016

LOGOS
Se acaba la corrupción
O SE ACABA EL GOBIERNO
        El general Rangel decía hace años, en una conversación informal de sobremesa: “Comparados con la corrupción gubernativa de ahora, los de mi tiempo eran tímidos raterillos”.
        Pero la deshonestidad es corrupción independientemente de su cuantía, se argumentó en respuesta a tal aseveración.
        Contestando el general que los montos de apropiaciones ilícitas tenían que ser considerados, pues no sólo agravaban el daño al erario, sino que en los comparativos sexenales hacían olvidar la corrupción de administraciones pasadas.
        Y eso vale la pena considerarlo en toda la amplitud de sus efectos, ya que cada administración sexenal apuesta a que se olvidarán sus corruptelas, pues los que vienen después empujando y presumiendo de honestos serán, sin lugar a duda, más rateros que los anteriores.
        Sin desconocer que en todo país la podredumbre comienza, como en los pescados, por y en la cabeza. Esta analogía no es metáfora, sino es un símil de realidad comprobada.
        Así que la corrupción se inicia en el gobierno y por el gobierno, y esto ha provocado históricamente que no pocos pensadores hayan desembocado en el anarquismo, algunos de destacado talento, como Pedro José Proudhon (1809-1865), de quien Carlos Marx (1818-1883), como su juez póstumo escribió: “era creador de paradojas brillantes, inesperadas, escandalosas y espectaculares, pero contradictorias”.
        Proudhon proponía desaparecer al gobierno, como forma de acabar con la corrupción, generada por la explotación del hombre por el hombre. Y en lugar del gobierno clásico y común, entregar el ejercicio del poder “a una sociedad viva, movida por la gente que trabaja, organizada en forma mutualista y con atribuciones normativas de autogestión”.
        Recientemente la Cámara Internacional de Comercio y la Comisión Nacional de Derechos Humanos dieron a conocer que “México se encuentra entre los 20 países con servidores públicos más corruptos”; pero lo más grave es que todas las leyes anticorrupción que el propio gobierno aprueba, a través de sus órganos y procedimientos legislativos, sirven menos que la famosa “carabina de Ambrosio”.
        Ya que si se aplican es para perseguir a sus enemigos, que es una manera grave de corrupción, exceptuándose ellos en el cumplimiento de tales normas. Obsérvese, como un preciso ejemplo, los aguinaldos millonarios que se otorgan, frente a un pueblo en miseria, los encumbrados funcionarios públicos de los tres poderes federales y estatales, y sus distinguidos funcionarios municipales, violando, casi todos ellos, lo ordenado por los artículos 13 y 127 de nuestra Carta Magna, al gozar de emolumentos que no son compensación a servicios públicos y estén fijados previamente por una ley, anual, equitativa, pública, la que no excederá la mitad de la establecida para el Presidente de la República ni igual o mayor a la de su superior jerárquico.
        Apliquemos esos preceptos constitucionales, y una Feliz Navidad para todos.

lunes, 12 de diciembre de 2016

LOGOS
Rafael Tovar y de Teresa
CULTURA PARA TODO Y PARA TODOS
        Tuve el honor de tratar a Rafael Tovar y de Teresa desde hace aproximadamente cuatro años; razones de responsabilidad en el mundo cultural hicieron que nuestras vidas se cruzaran y, ello, me condujo a gozar y a aprender de su plática sencilla, pero siempre ilustrada.
        A pesar de su migraña recurrente, sobre la cual charlamos algunas veces, el "embajador", como siempre lo llamé, ejercía con agilidad su pensamiento, tan lúcido como disciplinado; empero, sabía oír, y le gustaba que se le desmenuzara cada uno de los asuntos a tratar, así la solución surgía de manera natural, y esa decisión definitiva, en cuanto de él dependía, le daba puntual seguimiento.
        Sin conocerlo ni tratarlo, muchos fueron víctimas de prejuicios. Salvo sus apellidos, (que nadie escoge los suyos) Rafael Tovar y de Teresa era un alma con muchos estudios y reflexiones, pero natural y simple educado y amable, comúnmente de vestir informal, con ropa cómoda y medio desgarbada.
        Con pensamiento democrático y aguda sensibilidad social, compartió la idea de que los graves problemas de inseguridad, de Michoacán y de México, no se iban a resolver únicamente con la razón de la fuerza, sino también, y sobre todo, con la fuerza de la razón.
        Hizo suyo que si bien se requería del ejército, la marina, y la policía, a su vez era necesario la activa participación de la cultura, en forma permanente y eficaz, no sólo con eventos artísticos de toda índole, sino para que los destacados artistas dieran talleres con su técnica y su ejemplo, a los miembros de las poblaciones que lo solicitaban.
        De esa manera, entre muchas otras cosas eficientes y atractivas, se cuadriculó de actividad cultural, con caravanas integradas de artistas nacionales, estatales y locales, los 113 municipios de Michoacán. ¡Nunca antes se había vivido tal movilidad cultural!
        Pagando CONACULTA, bajo concursos públicos y trasparentes con participación de la sociedad, los gastos de todo eso de manera directa, sin que ingresara el dinero a las arcas michoacanas, las que adolecían desde el 2002 de un defectillo: cuanto dinero caía en ellas se metía a una licuadora, con el perverso ánimo de que nadie supiera a dónde y en qué se destinaba.
        Tovar y de Teresa supervisó total y personalmente lo que en materia de cultura en Michoacán se hizo. Y para esa labor valiosa y precisa, ya sea en la Ciudad de México, o aquí en Michoacán en las regiones de mayor problema, él estuvo presente. En la tierra caliente, las sierras, regiones lacustres, tratando con todo respeto y atención a cuantas personas deseaban hablar con él.
        Admiré su paciencia, capacidad y eficacia, para responder positiva y satisfactoriamente a todos.
        Cultura para todo, cultura para todos, fue una severa consigna. Cultura para respetar la vida de las personas, la integridad física de los demás, el patrimonio de todos. Cultura para que se respete cada hogar. Cultura para ser productivo, y distribuir en justicia lo producido.
        El embajador Rafael Tovar y de Teresa acompañó a la Revista Siempre el 18 de Octubre próximo pasado, en el Premio Nacional de Comunicación José Pagés Llergo 2016, bajo la anfitrionía inteligente de Beatriz Pagés.
        Ahí platicamos, lamentablemente por última vez, con quien fuera el primer Secretario de Cultura de nuestro país, quien nos deja una excelente y duradera impresión, y quien en la cultura mexicana ha impreso su huella personal, por siempre grata.

lunes, 5 de diciembre de 2016

LOGOS
Proporción áurea
FARO PARA LA ECONOMÍA
        Heráclito de Éfeso (536-475 a. de n. e.) acertó al oponerse a todo epicentrismo absoluto: “Todo se pivotea a través de todo”; aceptado por mí lo anterior, no puedo admitir que, eternamente, en torno al fenómeno económico giren los demás fenómenos sociales.
        Puede haber cosas que, en ciertas etapas de la vida del Hombre, estén condicionadas en grado sumo por el fenómeno económico. No creo tampoco en el determinismo.
        Donald Trump como presidente de EU puede perturbar a la economía mexicana y a la vida de nuestro país, a costa de dañar, claro está, a la cuenca económica en que se han convertido los tres países de la América del Norte: Canadá, EU, y México.
        Todo el perjuicio que genere para México el presidente Trump se revertirá, tarde o temprano, contra EU y él mismo; y eso, nunca se lo perdonarán los estadunidenses.
        Agustín Carstens con sólo anunciar su renuncia como gobernador del Banco de México inquietó a nuestra economía, y sangró al peso mexicano.
        Y él, quien es gente reconocida y capaz en su profesión, sabe de esos efectos, y quiso provocarlos. Sabe, además, que los fenómenos económicos están globalizado, que en el globo terráqueo el gobierno de los EU es hegemónico, y que con Trump acrecentará su voracidad egoísta.
        Carstens se doctoró en la Universidad de Chicago. Ha trabajado en México y EU en ejercicio de su profesión. Le gusta más laborar allá que aquí; y ha trabajado más para allá que para aquí.
        Técnicamente, en las confrontas sobre economía que al parecer ha tenido con el actual secretario de Hacienda y Crédito Público, José Antonio Meade, Carstens parece tener la razón. Los dos son economistas, pero éste de mayor edad, y con mejor experiencia, únicamente se ha dedicado a actividades económicas, mientras que aquél parece que acepta todo buen cargo que le ofrezcan. Así, mañana podría ser secretario de Agricultura o de Marina, y seguirá burocráticamente sonriendo.
        Pero regresando a Carstens, éste fue nombrado como gobernador del Banco de México por seis años, del primero de Enero del 2010 al 31 de Diciembre del 2015, y se le ratificó para otros seis años, del primero de Enero del 2016 al 31 de Diciembre del 2021. Y Carstens, sin más, el primero de Diciembre del 2016 presenta su renuncia a ese cargo, con efectos al primero de Julio del 2017.
        Es cierto, él no abandona el barco. Abandona algo más importante: la gubernatura del Banco de México. Y regresa a un cargo significativo al servicio del globalizador EU. No hay duda que va de migrante de alto nivel, de esos que el señor Trump sí acepta.
        Ojalá desde allá auxilie a México; y coadyuve a establecer para el mundo y nuestro país una economía de proporción áurea, esa proporción armónica conque está construido el universo, y el hombre.
        La economía no es el eje de toda la vida, y para que sea sano ese fenómeno debe ajustarse a las dimensiones humanas. Superemos toda desproporción económica, en trabajo y en capital.

domingo, 27 de noviembre de 2016

LOGOS
Fidel Castro Ruz
BROTARÁN REBELDES TALENTOSOS
        Quien sobrevivió como jefe de estado a más de 600 atentados, promovidos por perversas fuerzas gringas, concluyó su ejemplar vida en plena congruencia con sus valores.
        Fidel se anticipó a su porvenir por muchos años, y sobrevivirá a su fallecimiento durante muchos siglos, odiado por unos, y admirado y respetado por los más.
        En mi recuerdo lo sigo reconociendo como poseedor de un cerebro excepcional, con calidad expresiva de excelencia, y tenedor de gran firmeza en su actuar eficaz.
        Pensar, expresar y hacer, con señorío, honradez y decoro, lo condujo a ejercer como líder de líderes, sirviendo al pueblo cubano, del que provenía, como su razón de ser aún en su internacionalismo, y al que retorna como arquetipo que, por fortuna, trasciende al patrimonio común de todos los pueblos del planeta.
        A Fidel Castro lo encontré en mis lecturas de secundaria universitaria, en un folleto que contenía el texto de su autodefensa ante un tribunal cubano que lo procesó por el asalto al Cuartel Moncada en Santiago de Cuba, con un puñado de jóvenes encabezados por él y por Abel Santamaría.
        Luchaban contra la dictadura de Fulgencio Batista, y buscando que su país no fuera la zona de tolerancia de los estadunidenses, su inspiración era nada menos que José Martí, quien desde el centenario de su nacimiento, en 1953, seguía iluminando con profundas ideas y hermoso lenguaje los cerebros de una limpia juventud que burbujeaba en rebeldía.
        Ese alegato inició: "Nunca un abogado ha tenido que ejercer su oficio en tan difíciles condiciones", y terminaba: "Condenadme, no importa, la historia me absolverá."
        Por ello se anticipó a su porvenir. Ese alegato lo he leído y consultado muchas veces; y desde la primer lectura me impactó, pensando como consecuencia que quien sabía defenderse de tan sólida y lúcida manera, merecía defender a su pueblo desde la más alta jerarquía del gobierno.
        Empero, Fidel no sólo salvaguardó a su pueblo, sino que con toda inteligencia supo tomar para sí, frente al imperio yanqui, la dignidad que no quisieron ni supieron tomar muchos gobiernos de la comunidad internacional, aún a sabiendas del riesgo que corrían de un bloqueo criminal, frente a noventa millas de las costas del gigante enardecido.
        Cuba está muy lejos de ser un paraíso, pero ha sabido desarrollar a sus recursos humanos con educación, salud y cultura.
        Fidel muerto, debe de seguir sirviendo al pueblo tanto o más que el Fidel vivo.
        Personificará siempre, al menos para mí, al guerrillero exitoso, al maestro que enseñó con la palabra y la acción, al inteligente estadista, al político honrado, coherente y trabajador, al espíritu que a través de su servidumbre obtuvo su grandeza, al abuelo que escribía constantemente mensajes a conciencias receptivas.
        Siendo importante Fidel Castro Ruz, lo más trascendente es el buen ejemplo que esparció por el mundo, de donde seguirán naciendo rebeldes talentosos del hoy y del mañana.

lunes, 21 de noviembre de 2016

LOGOS
Desconocer los tratados
FABRICA DE DICTADORES 
        En la euforia de la globalización, en los últimos años del siglo XX, los países poderosos del mundo impusieron la idea de que los tratados eran normas jurídicas superiores a las constituciones de cada nación.
        Los jóvenes juristas mexicanos venidos de estudiar postgrados en el extranjero levantaron como banderas vanguardistas, con ingenuo y peligroso orgullo, que el artículo 133 de nuestra Carta Magna era obsoleto, y que debía ser reformado para dar mayor jerarquía a los tratados, sobre nuestra vieja y multiparchada constitución.
        Hoy, cuando está a punto de ser Presidente Donald Trump del imperio más poderoso de la Tierra, observamos en el laboratorio de la realidad la inoportunidad torpe de ese internacionalismo maliciosamente ventajoso.
        Tanto quienes fabricaron al Trump candidato triunfante, como sus seguidores multitudinarios, pretenden desconocer todos los tratados que no satisfagan su devoradora compulsión a la ganancia desmedida.
        Revelan las actitudes de Trump y Company un nacional socialismo de rubio copete: sólo los blancos, hombres, ricos, de su dogma económico, son los únicos capaces de ayudar a la población mundial de baja estofa llena de malos hábitos, hambre, mugre y delitos.
        El nazifascismo es una palabra acuñada en la primera mitad del siglo XX, pero su contenido conceptual se viene arrastrando en desarrollo a través de la historia del Hombre; y esa forma de organización requiere siempre de la fuerza violenta de un dictador, y de una conjugación de causas que la motiven.
        Benito Mussolini (1883-1945) en Italia, y Adolfo Hitler (1889-1945) en Alemania, personificaron a ese nacional socialismo que, opuesto al socialismo del proletariado soviético y al capitalismo americano, provocó la dramática y sangrienta Segunda Guerra Mundial.
        El ser humano como especie y como individuo parece no aprender de su pasado, y tropieza con la misma piedra, o con otra parecida a la anterior. La llegada al poder de Trump nos encamina como Humanidad a un análogo traspié.
        Entre todos, unos de una forma y otros de otra, estamos fabricando a un futuro dictador demasiado irascible y pendenciero. Si no se da una sólida unión entre las fuerzas estadunidenses opuestas al naciente e inédito nazifascismo, made in USA, con las organizaciones internacionales y los gobiernos de todos los países, apoyados por sus pueblos, va a provocarse una guerra catastrófica y final.
        Más nos vale a todos que el gobierno de Trump se convierta en una comedia innocua, que en una inicua tragedia. Y está a tiempo la Humanidad de prevenir, para después no lamentar.
        Quien siembra xenofobia, expulsión, odio, persecución, discriminación, imposición, choque, violencia, en pleno siglo XXI, se parece más a Mussolini y a Hitler que a George Washington (1732-1799) o a Abraham Lincoln (1809-1865); además de que cosechará desesperaciones borrascosas, y fuerzas mórbidas animadas por el espíritu de la venganza.

lunes, 14 de noviembre de 2016

LOGOS
Ante EU, dignidad e inteligencia
VALORES DEL PUEBLO MEXICANO
        El proceso electoral para la Presidencia de los EU aún no concluye. El cuatrienio de Donald Trump inicia el 20 de enero del 2017 si, mínimo, votan a su favor 270 electores en el próximo diciembre.
        Existe el 99% de posibilidades para que la mitad más uno de los 538 electores directos voten por Trump en pocos días; pero entendamos que, formalmente, aún no eligen presidente, ya que sólo eligieron el 8 de diciembre pasado a los delegados que ungirán Presidente de EU.
        En estos días pueden pasar tantas cosas; y también pueden no pasar.
        Analizo esa dialéctica con la que está escrito el universo, la que también rige a los humanos que, producidos por él, ejercen su capacidad de desarrollo para transformarse y variar el entorno, en la medida de su avance, y bajo su estricta responsabilidad.
        Todo cambia. El Presidente Trump será diferente al Trump candidato. ¡No hay duda! La incertidumbre es cómo evolucionará, para dónde y de qué manera serán sus variaciones.
        Miren que el empresario Trump, antiguo y contumaz donador de dinero para candidatos profesionales de la política, sufrió una metamorfosis hasta mutarse en candidato grosero y payasón que hizo suyo el sentimiento de decenas de millones de gringos molestos con el sistema estadunidense.
        Trump cambió para llegar al poder, y está a punto de acceder a él. Ahora tiene que cambiar, ante las irritadas manifestaciones mundiales y norteamericanas en su contra, para poder tomar posesión del cargo; y cuando jure poniendo su mano en la Biblia, o en una paca de millones de dólares, volverá a cambiar para poder ejercer la presidencia de su país, y el liderazgo mundial que pueden perder, si no cambia Trump  debidamente.
        Por Hillary votaron 59 millones, 727 mil, 805 ciudadanos; por Trump hubo 59 millones, 505 mil, 613 ciudadanos. Hillary ganó 222 mil, 192 votos ciudadanos más que Trump. Pero éste captó más Estados con cantidad mayor de emisarios al colegio electoral que próximamente elegirá al presidente.
        Los más de 59 millones que votaron por Hillary no están de acuerdo con las propuestas pasionales y alocadas del candidato Trump. Millones de los que votaron por Trump, al no aceptar a los odiados Clinton, tampoco están a favor de esas absurdas promesas del candidato Trump.
        Así que los mexicanos, canadienses, africanos, latinos, chinos, cubanos, asiáticos, venezolanos, europeos, la ONU, OEA, OTAN,  y todos a quienes Trump hizo referencia ofensiva en su campaña, que son muchos, necesitan establecer contacto eficaz con esos cientos de millones de estadunidenses que ven desatinadas las propuestas de Trump, para unirlos a la causa humanista.
        El Presidente Enrique Peña Nieto y el gobierno mexicano requieren comportarse con dignidad, inteligencia y firmeza, ante los cambios de Trump. Todos sabemos que los mexicanos han aportado territorio, mano de obra, recursos naturales y talento, para la grandeza americana.

martes, 8 de noviembre de 2016

LOGOS
Lo mejor de EU
TIERRA DE INMIGRANTES
        En la Estatua de la Libertad, levantada en una isla de Nueva York, se encuentra inscrito un significativo poema de Emma Lazarus, el cual sintetiza el mejor sentimiento que posee el pueblo de los Estados Unidos de América.
        "Dadme vuestros cansados, vuestros pobres, vuestras compactas multitudes que anhelan libertad, el humano desecho de vuestras playas llenas, los que vagan sin amparo, los que azota la tempestad, en mis manos levanto la antorcha que alumbra, los pórticos de oro por donde pasaran".
        Ese poema, y esa poetiza, parecen olvidados por la conciencia colectiva estadunidense a la que fue dirigido con agua intención por la neoyorkina de ascendencia judía.
        Emma murió de 38 años el 19 de noviembre del 1887. Su tumba en abandono se encuentra en un panteón de Brooklyn, sin flores, sin recuerdos. Sólo una piedra con su nombre y fechas de nacimiento y muerte.
        Su trabajo literario fue a la par con su labor cultural educativa dedicada a los inmigrantes, para orientarlos en la adaptación a la nueva tierra, y capacitarlos rumbo a la autosuficiencia.
        No hay duda, la mayor riqueza de los EU son sus habitantes, los que en número de 320 millones, aproximadamente, son, o descienden, de esos cansados, pobres, que anhelan libertad por haber formado parte de un desecho humano que suele vagar sin amparo, y a los que han azotado muchas tempestades.
        Emma deseaba para todo inmigrante, lo que sus padres desterrados y portugueses no tuvieron: ser recibidos por la luz de la antorcha que sujeta, segura, la mano de la libertad, alumbrando los pórticos de oro por donde merecen pasar los que buscan protección, y ofrecen el esfuerzo calificado de su trabajo honrado.
        El sueño poético de Emma dista mucho de ser la realidad de la mayor parte de los inmigrantes que ha llegado a territorio estadunidense desde su nacimiento como país soberano el 4 de julio de 1776, tras su Declaración de Independencia, hasta este enardecido 2016.
        Si los europeos que llegaron por las costas de este, los asiáticos por las playas de pacífico, los de color por el Caribe,  y los latinos por su frontera sur, contaran la historia de su migración a detalle, tendríamos un drama monumental, con variados atavíos de comedia humana.
        Empero, al final de cada aventura, tengo para mí que son más los logros que los fracasos. Los inmigrantes son los eficaces y inteligentes constructores de la grandeza americana y, por ende, de la pujante economía que eleva su nivel de vida.
        Las naciones aportadoras de seres humanos, rumbo a EU, han ganado divisas, pero se han desangrado, al perder por su incapacidad de organización, a una considerable parte de lo mejor de sus países.
        Con Hillary o con Trump seguirá la migración. El hombre por naturaleza es y será migrante. Mucho antes de lo esperado produciremos migración sideral rumbo a otros cuerpos siderales. Del polvo de las estrellas venimos, y a esa cósmica pavesa regresamos.

lunes, 31 de octubre de 2016

LOGOS
¿Joder al presidente?
EL PORVENIR ESTÁ PREÑADO
        Con deseo de parecer simplón, pero a riesgo de figurar como imprudente, el Presidente Enrique Peña Nieto expresó: "... mi único propósito es que a México le vaya bien. Estoy seguro que los anteriores presidentes, también, no han tenido otra misión más que ésa... un presidente no creo que se levante ni que se haya levantado pensando, y perdón que lo diga, cómo joder a México. Siempre han pensado en cómo hacer las cosas bien para México."
        Claro que todos sabemos que los propósitos pueden ser intenciones sanas que no garantizan para nada los efectos deseados; por eso el pueblo acuñó el refrán: "de buenas intenciones está empedrado el camino del infierno".
        Es correcto que un Presidente de México en funciones reconozca, en sus antecesores, la virtud de siempre trabajar por nuestro país; y es aceptable que él exprese que hace suya esa noble misión. Y no a la inversa.
        Lo que en su frase, ya transcrita, resulta impreciso es la palabra "joder", ya que en nuestro idioma, pero en diversos tiempos y en diferentes espacios tiene muy variadas significaciones que a nadie espantan, pero que pueden resultar poco o nada pertinentes para el caso, pero sobre todo para la connotada responsabilidad del emisor.
        Para mi comentario escojo el significado de "dañar", y de inmediato pregunto, incluyendo a los dos emperadores que hemos tenido en México, si alguno de nuestros presidentes jodió al país durante su mandato, desde José Miguel Ramón Adaucto Fernández y Félix, alías Guadalupe Victoria, hasta Enrique Peña Nieto.
        Y seguramente las respuestas provocarían un interminable listado de jodederas que sobrellevó, y sufre, nuestro país, con independencia de las buenas pretensiones que tuvieron, o tienen, tan distinguidos jodedores.
        Algunos de nuestros mandatarios provocaron daños nacionales por maldad, otros por ignorancia, ambición, imprudencia, ligereza, irreflexión, egoísmo, torpeza, vicios, y muchas otras causales.
        No hay duda que también hemos tenido mandatarios que, con sus cualidades, y condicionados por las generaciones y los tiempos, han hecho que México se desarrolle, y los mexicanos hayan vivido, o vivan, en una atmósfera de progreso, paz, y certidumbre.
        Esto nos permite, siempre, hablar bien de México y de los mexicanos. No se preocupe ni se ocupe por ello, señor Presidente Peña Nieto.
        Pues otros son los problemas que nos aquejan; por ejemplo, los resultados que tendrán las elecciones presidenciales en EU este martes 8 de noviembre próximo, en donde el republicano Trump se duerme y se despierta pensando en la manera de joder a México.
        Mientras la demócrata Hillary no olvidará la ayudita, boba pero peligrosa, que Usted con buen propósito le brindó a Trump, ni tampoco desatenderá las disposiciones que los grandes capitales ordenen para seguir jodiendo a México.
        Por nuestra parte, no dejaremos que nadie joda al Presidente de México, ni él mismo; y que nadie joda a México.

lunes, 24 de octubre de 2016

LOGOS
Violencia y tranquilidad
NO PUEDEN HACER PAREJA
                Arely Gómez González, procuradora General de la República, expresó desde Guadalajara “que debe evitarse que la violencia arrebate a las personas su tranquilidad y que el miedo condicione a la justicia”. Al menos eso fue lo que los medios masivos de comunicación informaron.
                Lo primero que la procuración de la justicia debe evitar es la violencia, ya que no sería aceptable y, acaso, ni posible, que se deja a la violencia tal como está en el país, y que exclusivamente se evite el que dicha brutalidad nos arrebate, a los gobernados, nuestra tranquilidad.
                Entre el derecho y la vida, la tranquilidad y la violencia no pueden hacer pareja, y esto lo sabe el más limitado de los pasantes que esté haciendo su servicio en alguna agencia del ministerio público.
                Por otra parte, “que el miedo condicione a la justicia” no debe ser aceptado jamás, y en esto acierta la ciudadana procuradora, siempre y cuando tampoco se permita, por parte de los órganos encargados de la procuración de justicia y de los organismos jurisdiccionales, que la justicia emanada de ellos no vaya a condicionar o a provocar miedo y pavor en los justiciables.
                Cuando un miembro de las fuerzas armadas, o un elemento de la procuración de la justicia, o un integrante del Poder Judicial, es afectado por criminales nos agravia a toda la sociedad, y nos inquieta que quienes tienen como atribución el protegernos sufran por ello. Y en este caso, a más de agradecerles, les debemos brindar nuestro apoyo y estímulo para que no tengan miedo y para que jamás claudiquen.
                Pero también, a ellos mismos, les pedimos que nunca siembren el miedo en la población, porque así jamás auxiliarán a la justicia y, en cambio, sí motivarán que ésta sea vista como generadora de temor, y no de confianza.
                Tengo para mí, al margen de las encuestas que el INEGI ha hecho al respecto, que la sociedad mexicana cree más en el poder judicial que en las procuradurías y en los órganos policiacos.
                Y obvio que esa misma población tiene mayor simpatía por los ministerios públicos que por los policías.
                Como también observo que los justiciables esperan mejores resolutivos del Poder Judicial de la Federación que de los poderes judiciales de las entidades federativas.
                Nada hay perfecto; todo es perfectible. Esto vale más en seguridad pública, procuración de justicia y en los órganos jurisdiccionales. Empero, en México, merece mayor aceptación social el poder judicial que el legislativo y el ejecutivo, tanto estatal como federalmente.
                Y mucho debe llamar nuestra atención que el INEGI, según notas en medios masivos, dé a conocer que "el 69% por ciento de los mexicanos no confía en la Suprema Corte de Justicia de la Nación", pero sin precisarnos el método y los términos de su encuesta.
                De ser cierto lo anterior, andaríamos en focos rojos en todo lo de gobernabilidad. Por bien de todos, restablezcamos, honesta y eficazmente, la credibilidad mutua.

martes, 18 de octubre de 2016

LOGOS
Pavorosa realidad
ASESINARSE ENTRE MEXICANOS
        La violencia en México no se ha frenado, y todos seguimos siendo víctimas de ella; la inseguridad, por tanto, va ampliando sus márgenes.
        Desde los asesinatos masivos, secuestros, asaltos, violaciones, robos a casas habitación, cobros de piso, tomas de carreteras y de calles, quemas de autobuses y carros, constantes hallazgo de tumbas clandestinas, abordajes delincuenciales a transportes públicos en ciudades o en caminos federales o locales, bajas en los encontronazos entre los miembros del crimen organizado y las fuerzas armadas del país, despojos de instalaciones educativas, desde jardines de niños hasta universidades, irrupciones ilegales a todo tipo de oficinas de gobierno, más los delitos de todo tipo, están imparables.
        El anterior enlistado de nuestra pavorosa realidad cotidiana no va a la baja, sino en aumento. Y si no somos capaces de reconocerlo, nos exhibimos como ineptos para solucionarlo.
        Ningún discurso, por más bien estructurado y pronunciado que esté, puede tapar o encubrir la verdad lacerante.
        A Renato Sales Heredia, a Miguel Ángel Osorio Chong y al Presidente Enrique Peña Nieto, la población les pide hechos, y no palabras.
        Puede ser que nuestras autoridades federales, estatales y municipales, con buenas intenciones, consideren que con retórica y optimismo pudieran, si no solucionar, no agravar los problemas; empero, el caso es que se ven rebasadas e ineficientes.
        Lo menos que podemos esperar de un gobierno es que gobierne, y gobernar es tanto prevenir como remediar, aplicando el derecho y la coercitividad, sin ningún temor, y con inteligente firmeza.
        Las autoridades lo hacen mal, los criminales lo hacen peor, y las llamadas comisiones de derechos humanos no hacen, deshacen.
        A ello sumemos la desorganización de la sociedad, salvo casos de excepción, dignos de encomio; raras avis con las que no simpatizan ni funcionarios ni delincuentes.
        Y todos los implicados, víctimas y victimarios, somos mexicanos.
        Pareciera que organizaciones perversas con residencia fuera de nuestro país, con cómplices de aquí, como la de "Rápido y Furioso", tan protegida para que nadie sepa de ella por muchos años gracias a determinación presidencial estadunidense, hubiese armado un plan para que los mexicanos nos matáramos entre sí, llevando a la descomposición nuestra estructura nacional, para un fin avieso.
        Hechores de las peores cosas, a quienes el Bob Dylan, Premio Nobel de Literatura 2016 les dijera: "Ustedes, que fabrican las grandes armas. Ustedes, que construyen los aviones de la muerte. Ustedes, que construyen todas las bombas. Ustedes que se esconden tras los muros. Ustedes, que se esconden detrás de escritorios. Sólo quiero que sepan. Que puedo verlos a través de sus máscaras."
        Para agravar ese siniestro presente, la sucesión presidencial se encuentra en puerta; y desgraciadamente se advierte que los posibles contendientes también traigan sus mascaras.

lunes, 10 de octubre de 2016

LOGOS
Democracia: ¿decisión mayoritaria?
LA GRAN EQUIVOCACIÓN
        Lo ideal es que la democracia sea la decisión de todo el pueblo, a favor de todo el pueblo. Ojalá y esto se diera siempre.
        Lo real es que, equivocadamente, se acepte que la democracia se da cuando la decisión la toma la mayoría del pueblo, aunque esa disposición dañe al pueblo.
        Considero más democrática la determinación que auxilie al desarrollo del pueblo, aunque éste no la haya tomado.
        Y... ¿quién califica si la resolución auxilia o no a ese desarrollo de la mayoría? La respuesta obvia es: esa mayoría, preparada y oportuna.
        Bajaré las anteriores afirmaciones a casos concretos, por ejemplo, al acuerdo de paz entre el gobierno colombiano y las FARC. Dicho gobierno con facultades constitucionales firmó ese convenio que, ipso facto, fue visto con simpatía por todo el mundo, en su efecto y literalidad, pero no aceptado por una mayoría mínima de ciudadanos colombianos exclusivamente en lo que corresponde a las ventajas obtenidas por las FARC.  
        De cada 100 ciudadanos colombianos con derechos a voto, exclusivamente votaron 37; y de éstos, únicamente votaron por el "no", poco más del 50%. Este ejercicio de voto lo provocó y autorizó el Presidente Juan Manuel Santos, cegado por la inmediatez de un éxito que parecía aplaudido por todos. Acaso la abstención, por su naturaleza, es un "sí" tácito.
        Y con esa seguridad ingenua de buscar la aceptación mayoritaria del pueblo de Colombia, Santos fabricó su propia trampa.
        Así que las mariposas amarillas de un sexo desaforado en la literatura, volaron en los discursos alentados por la paz, pero se detuvieron por el precio. Entre los lepidópteros amarillos y la guerra, escogieron a las mariposas, aunque después prosiga la guerra.
        En la vida del ser humano observamos que muchos de sus acuerdos de paz traen, en sus entrañas, la semilla de las futuras guerras.
        Y bajo el papel firmado, como documento que anuncia el fin de sangrientas contiendas, siguen ardiendo los añejos rencores que forjan las confrontas mortíferas venideras.
        Ojalá y ese acuerdo de paz entre el gobierno colombiano y las FARC no sea de esa naturaleza, pues el Comité Noruego otorgó el Premio Nobel de la Paz al Presidente Juan Manuel Santos para auxiliar al éxito de ese pacto; y Santos, con humildad inteligente, no sólo debe compartir ese premio con las víctimas de la guerra, sino con todos los que han hecho, o pueden hacer, posible la paz desarrolladora de ese país hermano, entre otros, Álvaro Uribe, Hugo Chávez, Raúl Castro, Rodrigo Londoño, el Papa Francisco, y todo el pueblo unido de Colombia.
        Si hubo capacidad para convencer a las FARC, después de 52 años, con mayor razón debe haberla para persuadir a esa parte de colombianos que, encabezada por Uribe, se oponen al olvido de los delitos de algunos rebeldes, sin decir nada del olvido de los delitos de algunos funcionarios públicos.
        Sin mutuas concesiones, equilibradas y armónicas, la paz es quimera, y ese buen acuerdo corre el riesgo de ser la matriz de la próxima contienda.

jueves, 6 de octubre de 2016

LOGOS
Hillary y Trump
EL DÍA DEL PELIGRO
        La ciudadanía estadunidense, a través de su complejo procedimiento electoral, decidirá el martes 8 de noviembre del 2016 al XLV Presidente de los Estados Unidos de América.
        Aunque formalmente los candidatos son seis, dos de ellos son los que tienen la posibilidad de triunfar: la demócrata Hillary Clinton y el republicano Donald Trump.
        Por obvias razones, entre otras el odio manifiesto de Trump a México y a los mexicanos, nuestra simpatía va dirigida a Hillary; y acontece lo mismo en la mayoría de los países del orbe, pues mundialmente la inclinación es a favor de la señora Clinton, ante la repulsiva y peligrosa actitud grosera del millonario Donald, su impericia, y su derechismo fascista.
        Pero ése es el sentir internacional. Distinta apreciación tiene la mayoría ciudadana de los Estados Unidos de América, quien no estando satisfecha con los prospectos, con razón o sin ella, no votarán, unos, y otros tendrán que decidir por el menos malo, según intereses y convicciones.
        Lo bueno de Trump es su presumida franqueza y su enérgico carácter, lo malo es que está alocado, majadero, sin experiencia política, y lleno de odio en las 24 horas de su día; ni siquiera se siente político, actúa como un empresario, tiene tirria por la política, y gusta de la ganancia a como dé lugar. Burdo y grosero, por una buena lana, vendería el poder atómico de su país.
        Lo bueno de Hillary es su preparación política y experiencia en el poder, lo malo es que, como parte de esa familia Clinton, está por cuarta vez en contienda para la presidencia de los EU, es de izquierda según el criterio conservador gringo, de conducta ética relajada, y corrupta, sin habérsele probado plenamente.
        Agustín Carstens, gobernador del Banco de México, agringado y cuidadoso, se ha visto obligado a declarar: “Trump como presidente sería un huracán de bastante intensidad, en particular si cumple con lo que ha venido mencionando… México estaría en mejor terreno si Hillary resultara victoriosa”. Y correlacionó a Trump con la cotización del peso, el que a su decir “está subvaluado al no reflejar los fundamentos sólidos de nuestra economía”.
        Carstens puede estar equivocado. El pueblo mexicano asegura que perro que ladra no muerde, que en EU no se hace lo que dice el presidente, porque está acotado por poderes económicos y políticos vigorosos que cuidan de sus intereses.
        Nadie nos puede garantizar que en terreno de Hillary nos vaya mejor, cuando lo bueno para nosotros debe depender de la capacidad organizada de los mexicanos y no de Hillary. Y la devaluación del peso es más culpa del gobierno mexicano que de Trump.
        La verdad, a la vista de todos, es el poderío de EU; y de esas dimensiones es la importancia del resultado electoral para elegir Presidente de los Estados Unidos de América.
        En poco más de un mes será la elección presidencial estadunidense y, a cómo andan las cosas, el día del peligro para todos, incluido EU.

lunes, 26 de septiembre de 2016

LOGOS
Ceguera del entendimiento
TIEMPO DE ABRIR LOS OJOS
        "Mi aspiración y trabajo tiene como objetivo elevar la calidad de vida y el bienestar de los mexicanos", expresó con énfasis, hace días, el Presidente Enrique Peña Nieto.
        Lo afirmado por el ejecutivo federal sólo reitera su propósito en el ejercicio del más significativo cargo público en nuestro país; y siendo ése su más elevado anhelo, el resultado de sus trabajos es por completo opuesto a su objetivo. Daré ejemplos.
        El que la economía mexicana esté descontrolada, y cuesta abajo, no eleva para nada la calidad de vida y el bienestar de los mexicanos.
        Tampoco la sangrienta y desbocada inseguridad que  padecemos, en todo el país, sube la prosperidad de nuestro pueblo.
        Nuestros trastornos nacionales, que son muchos y están a la vista de todos, no pueden proporcionarnos esa calificada felicidad que como meta se fija la intención presidencial.
        Porque resulta que tanto la economía como la seguridad, la educación como la política, igual que todos los demás fenómenos sociales de nuestro México, han sido sectores en donde se han aplicado actos de autoridad del gobierno mexicano con ese sanísimo y bien intencionado propósito del Presidente Peña; y, en todos ellos, los efectos han sido diametralmente distintos al objetivo buscado.
        ¿Por qué?, ¿por qué si el firme deseo presidencial ha sido generar el bien a los mexicanos, el efecto está produciendo males al país?
        La caída del peso mexicano frente al dólar estadunidense no puede ser para bien de los mexicanos, más cuando ello de inmediato provocó aumento en los precio de los alimentos, colegiaturas, transportes, y en todos los bienes y servicios que estarán más distantes de un pueblo desempleado o con salarios de hambre.
        La inflación, la recesión, la devaluación, la deflación, todos los males económicos nos están cayendo de a montón y al mismo tiempo y, con eso encima, el Presidente Peña Nieto nos espeta, encubiertamente, la responsabilidad de esas dolencias: "... con frecuencia se olvida que la construcción de México no es una tarea de un solo hombre. Tampoco se reduce a los esfuerzos de un gobierno sexenal. A México lo construyen todos sus ciudadanos..." Y esto es cierto, pero a quien se le había olvidado es al presidente.     Recordemos la publicidad personalísima y personalista que ha hecho el Presidente Peña en los medios masivos de comunicación, a precios exorbitantes y a costa de los contribuyentes.
        Y como en el mundo de la política lo que hace la mano hace la tras, gobernadores, presidentes municipales, senadores, diputados, regidores, a costa del erario, con publicidad millonaria cubren su franca mediocridad y los resultados adversos a sus expresos propósitos de elevar la calidad de la vida de los mexicanos.
        La avanzada técnica, en el campo de la medicina, está por poner fin a la ceguera; ojalá, el pueblo de México también ponga fin a la ceguera del entendimiento. Ya es tiempo de abrir los ojos.

martes, 20 de septiembre de 2016

LOGOS
Masas enardecidas
PELIGROSAS PARA MÉXICO
                Las contradicciones generadas por nuestra forma de organización, en México, se han agravado en lugar de resolverse.
                En algunos momentos parece que todo va a estallar, pero en lugar de la catástrofe presentida se produce una pausa, en calidad de tregua salvadora.
                Pero si esa cesación se interpreta mal, y se valora como triunfo del gobierno, ese respiro queda desperdiciado, y no se utiliza para recomponer lo descompuesto, y para desarticular esas peligrosas contradicciones.
                Nunca imaginamos, los mexicanos, que íbamos a ver a compatriotas enardecidos exigiendo la caída de Peña Nieto como Presidente de México.
                Desde el punto de vista de no pocos, el Presidente Peña ha cometido significativos errores; empero, a esos equívocos no debemos sumar la insensatez de tronar la estructura presidencial que sostiene al gobierno mexicano.
                A ninguna oposición gubernativa le convine dejar en escombros a las instituciones nacionales, menos a los 120 millones de mexicanos.
                Tenemos corrupción, y al más alto nivel; inseguridad de orígenes nacionales y externos; oxidada y maltrecha productividad; pésima distribución de bienes y servicios, con riqueza extrema para pocas familias y pobreza en el 40% de nuestros connacionales; mal sistema educativo; leyes sólo en el papel para guardar apariencias, entre otras calamidades.
                Paralelo con lo anterior, o incluso entretejido, tenemos aún recursos naturales extraordinarios; una infraestructura aceptable, con sus deficiencias, pero en todos los sectores; una raíz histórica sólida y sana; y una mayoría poblacional trabajadora, capaz de seguir desarrollando al país, honorable por su dignidad y principios éticos, la que no permitirá que nadie destruya a México.
                El tamaño de nuestros problemas no supera a la gigantesca capacidad del pueblo mexicano; y el Presidente de México debe tener esta seguridad, como también necesita tener la certeza de que las circunstancias le exigen desempeñar un papel que excede con mucho a su capacidad personal, por lo que urge que aproveche las treguas, en estos dos años faltantes, para superarse a sí mismo, y mejorar a su equipo con gente que sepa solucionar las dificultades que se viven, y las que advendrán en el transcurso de estos últimos meses de su sexenio.
                No basta ocultar la ineficiencia con una superficial gracia personal, hacer gestos oratorios para proferir de corridito palabras que no se sienten, adoptar actitudes acartonadas de supuesto tribuno, saludar y sonreír velozmente con fingido comedimiento histriónico.
                Es necesario ser natural, no robar ni permitir que roben, conocer, respetar y querer, a la población que representa, laborar y auxiliar en la organización del trabajo de todos, con el honesto ánimo de solucionar problemas en desarrollo de los mexicanos y el país, hasta el último segundo del mandato.
                Las masas enardecidas no piensan ni construyen. Los mexicanos construimos y pensamos.

lunes, 12 de septiembre de 2016

LOGOS
Sólo reacomodo de fichas
CAMBIEMOS, SÍ, HACIA UN SUPERIOR SISTEMA
                No hay cambios en el gabinete del Presidente Enrique Peña Nieto, pues lo único que hubo fue un reacomodo de ciertos funcionarios, o de fichas.
                José Antonio Meade dejó Desarrollo Social para retornar como secretario de Hacienda; Luis Enrique Miranda pasó de subsecretario de Gobernación a ser secretario de Desarrollo Social; y, así, los demás reajustes.
                Quien formalmente quedó fuera de la administración es Luis Videgaray, supuesto árbol caído al que se achacan los efectos negativos de las torpezas en el sexenio que transcurre, pero quien, no hay duda, seguirá en plena actividad, operando tras bambalinas lo que le encargue su amigo el presidente.
                A Videgaray lo han calificado de “vicepresidente”, “primer ministro”, “el brazo operador del presidente”, “el cómplice de mayor confianza de Peña Nieto”, y hasta Trump lo tasó: “Con Luis, México y los Estados Unidos hubieran hecho tratos maravillosos, donde ambos, México y EU se hubieran beneficiado”.
                ¿Qué pasaría con Luis Videgaray si los votos para Presidente de los EU del próximo 8 de noviembre favorecieran a Trump?
                Si los mexicanos y la mayoría de los habitantes del planeta votáramos, en ese proceso electoral estadunidense, Donald Trump jamás sería Presidente; pero, en la realidad, los ciudadanos gringos que voten serán los que determinen el futuro de su país, y del mundo, dada la exaltación inaudita y enardecida de una masa yanqui que se ve representada por el perfil fascista del candidato republicano.
                De ganar Trump, Luis se convertiría, mínimo, en el mexicano de mayor confianza del Presidente de los EU, y muchos de sus actuales detractores buscarían, sumisos, los favores de su influencia. No siempre la condición humana está a la altura del decoro.
                Pero, con independencia de esos resultados electorales de nuestros vecinos norteños, estoy convencido de que, para desgracia de nuestro país, el Presidente Enrique Peña Nieto cayó en una trampa, construida por muchos, incluyéndole a él, en la que cualquier movimiento que realice perjudica, tanto a México como al propio titular del ejecutivo federal.
                Así, la renuncia de Videgaray no salva a Peña Nieto; como su permanencia en la Secretaría de Hacienda y Crédito Público no le hubiese dañado más de lo que ya le afectó.
                El escritor francés Juan Bautista Alfonso Karr (1808-1890), en Las avispas, expresó: “Cuanto más se cambie, (con reformas) es más de lo mismo”.
                Giuseppe Tomasi di Lampedusa, italiano, (1896-1957) en El Gatopardo, indicó: “Si queremos que todo siga como está, es necesario que todo cambie”.
                Y parodiemos al filoso verso del poeta Antonio Plaza (1833-1882): Es el mismo buey de antaño, es el mismo arado viejo, es el mismo desengaño clavado en el entrecejo; y revoluciones van, más reformas y elecciones vienen a destajo, y el pueblo sigue sin educación ni pan ni trabajo.
                Cambiemos, sí, hacia una superior forma de organización social.

martes, 6 de septiembre de 2016

LOGOS
Muromanía de Mr. Trump
DESTRUIR A EU POR AISLAMIENTO
        Criticar más al Presidente Enrique Peña Nieto por sus variadas y consecutivas ineptitudes, en el ejercicio de su encargo, no vale la pena por ahora.
        Ojalá, antes de volverse a ir de bruces en perjuicio de México,
cuide más la investidura presidencial que le fue encargada. A los gobernados se nos acrecienta la responsabilidad de cuidar que tal institución presidencial, por el bien de todos, no se siga dañando.
        Por otra parte, lo perverso de las personas malas se afila, y se torna peligroso, cuando la audacia le acompaña; y observo que Donald Trump, poderoso candidato a la Presidencia de los Estados Unidos de América, es intrépido y maligno. Pero de nada sirve vituperarlo con palabras despectivas.
        Mejor analicemos la más importante de sus propuestas electorales, la que lo exhibe a plenitud: construir un muro que divida al territorio mexicano del territorio gringo.
        Ese proyecto es viejo, costoso y descabellado, y Trump lo convirtió en lo central de su grotesca campaña.
        Con el leonino Tratado de Guadalupe Hidalgo de 1848 el expansionismo de los Estados Unidos de América le impuso a México, previa una guerra injusta, la pérdida de más de la mitad de su territorio, reserva del crecimiento poblacional de nuestro país.
        Desde entonces, los límites entre ambas naciones fueron los cauces de los ríos Bravo y Colorado; y los problemas se ocasionaron por la movilidad de sus vertientes, y las alteraciones acuíferas, tanto por distribución como por salinidad made in USA.
        Bajo entendimiento mutuo fueron superándose cada una de esas cuestiones.
        Empero, a partir de 1994 los EU pusieron en marcha la Operación Guardián, con el ánimo de "impedir la entrada a inmigrantes ilegales", e iniciando la construcción de un muro en diversos tramos fronterizos, y con distintas formas y materiales, que mide actual y aproximadamente mil kilómetros; obra ineficaz, y onerosa política, ética y económicamente.
        Sintetizo lo anterior como antecedente histórico, para que se recuerden esos terribles agravios que son una profunda raíz de los problemas actuales que ha venido a despertar, con impertinencia majadera, el candidato Trump.
        A eso hay que agregar que no sólo han obtenido de México esos territorios, sino la mano de obra eficiente y barata que ha generado alta productividad e inmensas ganancias; además de imponer el que se les abastezca de enervantes para dar valor a sus soldados en las guerras, y distracción enajenante a sus jóvenes en la paz.
        Supongamos que construyan el muro en su frontera sur; entonces, las oleadas migrantes que se avecinan pasarían por la frontera con el Canadá, por sus costas en el Pacífico y en el Atlántico, lo que motivaría a construir, siguiendo el proyecto Trump, cuatro muros que aislarían a EU del resto del planeta.
        EU dejaría de ser líder mundial por falta de responsabilidad en su liderazgo.
        ¿Dejarán los estadunidenses que Trump destruya a los EU?

lunes, 29 de agosto de 2016

LOGOS
Ante dos años peligrosos
PRESIDENTE EN DESGASTE
        No terminan bien quienes serruchan la rama que los sostiene; y el gobierno mexicano y sus opositores efectúan, eficazmente, esta cándida faena.
        Igual, resulta un absurdo destruir, y permitir que destruyan, a las instituciones que, sustentando a nuestro país, le han sido encomendadas al Presidente de México.
        Tratándose de las atribuciones legales del Ejecutivo Federal, la responsabilidad directa es del Presidente Enrique Peña Nieto, quien como candidato generó por su publicitada juventud, y grato aspecto físico, aceptación electoral y esperanzadas expectativas.
        Hoy, ante su Cuarto Informe de Gobierno, se le observa desgastado, impopular, y presionado por todos, incluso, auto comprimido; perturbadora situación que lo excita a seguir cometiendo aberraciones que, a la vista de todos, sirven a sus eficientes enemigos para afectarlo cada vez más.
        Si esos ataques exclusivamente afectaran a Enrique Peña Nieto, la mayoría de los mexicanos estaríamos impasibles; sin embargo, él es el Presidente de México, y nos preocupa y nos llama a atender esa situación peligrosa de sus dos últimos años de sexenio.
        Por ello, mis iniciales sugerencias están dirigidas, no a sus opositores, sino al Presidente Peña, quien seguramente revisó y autorizó la publicidad de su reciente informe.
        Ahí, aparece otra vez la imagen personal de él, antes que cualquier otra gente, reflejando una vanidad soberbia que ya no se sostiene. Carita ya no mata nada. La publicidad debe ser de conceptos, las fotos de obras y de gente trabajadora del pueblo de México, a quienes todos debemos los avances que hemos tenido.
        Esa publicidad presidencial, como la de todos los políticos fatuos en activo, es pagada con las contribuciones de la población tributaria, quien es la primera ofendida con ese desatinado derroche.
        Y en esa deplorable propaganda se lee aún: "Lo bueno casi no se cuenta, pero cuenta mucho".
        Todos sabemos que lo bueno se cuenta, cuando hay algo bueno que contar, incluso en las acciones políticas provenientes de la función pública; pero estas cosas buenas al Presidente de la República, si es inteligente, le corresponde atribuirlas a la sociedad, y no presumirlas como propias, por más que sus lambiscones y aplaudidores de oficio lo impulsen al equívoco.
        Lo malo en la acción pública corresponde al funcionario responsable, y esto cuenta muchísimo, más cuando exista un vínculo de causalidad personal entre el acto u omisión con el producto dañoso producido.
        El Presidente de la República ni en su vida personal puede ser amiguero. Al nombrar gabinete no forma pandilla ni constituye socios ni menos cómplices, ya que el interés nacional está encima de todos y de todo. Hasta las pláticas con sus íntimos deben ser cuidadosas, y éticas, pues sus amigos suelen exagerarlas.
        Si defendiera a los mexicanos, como cubre a sus cuates, sería un aceptable Presidente.
        El poder desgasta, pero el no poder desgasta más.

martes, 23 de agosto de 2016

LOGOS
Inexistente reforma educativa
DON DE LA LOCUACIDAD
        En la realidad, no existe ninguna "reforma educativa" en México del 2012 a la fecha; salvo si aceptamos que existe todo sobre lo que podemos hablar: un "fantasma" o un "profesor".
        La mal llamada "reforma educativa", incluida en paquete de
reformas impulsada por el ya olvidado Pacto por México a fines del año 2012, nunca ha sido tal. Mal inició y terminará peor.
        Deductivamente, haciendo su debut como reforma y adición a los artículos 3o y 73 de nuestra Carta Magna, partió desde las oficinas del poder hacia las aulas, con soberbia antidemocrática, sin escuchar a padres de familia, alumnos, maestros, sin considerar el amplio y complejo fenómeno de enseñanza aprendizaje.
        Erró el Presidente Enrique Peña Nieto y sus consejeros en educación al creer que dicha "reforma educativa" sería la solución a los conflictos que padecemos en esta materia; y, a la inversa, generaron problemas mayores.
        El equívoco laboral medicamentoso, envuelto en delgado papel educativo, agravó la enfermedad.
        Se ordenó invertir millones de pesos en los inmuebles escolares; y es correcto, siempre que se entienda que las escuelas son los alumnos, los maestros y los padres de familia, y no los edificios con muebles, que deben ser instrumentos dignos, sí, pero no constituyen "reforma educativa".
        Llegados al 2016, dicha reforma educativa sólo ha producido significadas y molestas marchas, tomas, pérdidas económicas cuantiosas, confronta entre mexicanos, afectación internacional, quemas, destrucciones, heridos y muertos.
        Frente a lo anterior, el secretario de Educación Rubén Nuño Mayer presentó, carrereado, un producto burocrático llamado "Modelo educativo III", el que siendo un esfuerzo, pero tardío, no llega a ser, tampoco, una "reforma educativa".
        Ese documento es, exclusivamente, un puñado de elementos orientadores, valiosos unos y equívocos otros, en materia pedagógica, laboral, y administrativa, puestos en el campo de la educación escolarizada.
        Ojalá el Presidente Peña Nieto y la SEP entendieran que la educación, y su ausente reforma necesaria, va más allá de lo escolar, lo pedagógico, laboral y administrativo.
        Hoy, lo más trascendente de la educación se ubica en la familia, en los medios masivos de comunicación y en la vida. Los elementos pedagógicos, laborales y administrativos, del documento no llegan a ser reforma educativa. Si anda mal la familia, los medios masivos y la vida, deplorablemente discurrirá la educación.
        La "reforma educativa" como tal no existe. La CNTE quiere frenar las disposiciones que afectan sus privilegios. Si no se termina el sistema de privilegios, sólo pasarán de manos de la CNTE a otros.
        En muchas escuelas no ha habido clases. La iniciativa privada tiene, en la educación escolar, un excelente negocio. Las autoridades educativas del actual gobierno no han sido educadas para gobernar.
        Y esos implicados siguen ejerciendo el don de la locuacidad.