lunes, 29 de enero de 2024

LOGOS

Del jardín de las delicias

AL INFIERNO DE LOS PECADORES

        El actual presidente mexicano vive en el jardín de las delicias, pero tiene el deseo de ir al infierno.

        Desde el inicio de su ejercicio se afincó en el gozo de tener a su disposición (cada año) más de una decena de billones de pesos, ejercidos con todo su autoritarismo.

        Todo su esfuerzo gira en sus mañaneras; ya lleva más de 1200 bloques informativos adoctrinadores; ahí, comete actos ilícitos (civiles y penales) en cadena nacional.

        Cada mañanera le ha costado, al erario federal, aproximadamente 500 mil pesos; es decir, que por estos eventos hemos gastado los contribuyentes, mínimo, en cinco años, 900 millones de pesos, dignos de invertirse en mejores causas.

        No cuento, en esas cantidades, los escurrimientos que la impericia y la pudrición oficial provocan.

        Estamos sobreviviendo a una sucesión presidencial adelantada.

        Por capricho del despilfarrador déspota, nos encontramos en un proceso electoral tan inédito, como inconstitucional.

Sin norma legal, le urgía al presidente electorero levantar polvaredas, para esconder, como lo hacen los gatos, sus porquerías.

Los primeros escarceos de este proceso sucesorio se asomaron a mitad del año 2021.

Desde entonces, el intrigante López obró, al mismo tiempo, como presidente de la república, a calidad de máxima autoridad electoral, a modo de exclusivo líder de su movimiento, y en su carácter de jefe de campaña para Claudia Sheinbaum.

Esas actividades del presidente López, al margen de nuestra Carta Magna, las sigue realizando a la vista de todos.

¿Cuándo dinero nos ha costado la campaña de Claudia?

Es tan enorme la cantidad, que nadie lo sabe.

Ni siquiera el presidente López tiene la cantidad exacta de esas ilegales erogaciones. Desde su jardín de las delicias, a similitud de la obra maestra del pintor de los Países Bajos Jheronimus van Aken (1450-1516), mejor conocido como El Bosco, nuestro burdo presidente no conoce con precisión cuanto le ha invertido a su corcholata.

Acarreos multitudinarios, murales, radio y televisión, periódicos, revistas, redes sociales, transportes aéreos y terrestres, banquetes, tortas y refrescos, carteles, obsequios, salidas al extranjero con séquitos caros, consejeros bien pagados, soldados, marinos, guardias, manutención de equipos directos, corruptos moches dentro de los moches, e innumerables cosillas, igual de costosas, hacen cantidades inimaginables de miles de millones de pesos.

El manirroto López, con el dinero de los impuestos, no está al tanto de lo que lleva gastado en su marioneta Claudia; empero, recién dijo el presidente: “Quiero ir al infierno, para ver a los pecadores”.

Para ese delicado viaje, ásperamente se inspiró en la “Comedia” del florentino Dante Alighieri (1265-1321), quien no la tituló como ‘Divina Comedia’, pues quien la nombró así, en 1375, fue Giovanni Boccaccio.

La primera parte de la “Comedia”, la denominó ‘infierno’, el que en su frontispicio sentenciaba: “Quien entre aquí, abandone toda esperanza”.

Por ello, para que no pierda la esperanza, presidente, no vaya al infierno sólo por ver pecadores. 

Basta con que usted se observe en un espejo, y aviste a todos sus colaboradores, junto a todas sus corcholatas.

Escudriñe bien a Claudia y confiese, en su personalidad de diablo mayor de este ejercicio presidencial, cuántos billones de pesos le invertirá a Sheinbaum, quien va que vuela para perder la elección de este 2024.

 


martes, 23 de enero de 2024

LOGOS

Democracia o dictadura

ES HABITUAL EL OLVIDO

        El presidente de México (el 15-enero-2024, en su cotidiana conferencia por la mañana, desde donde realiza su mayor esfuerzo gubernativo) reprodujo parte de uno de los atrayentes programas del periodista Víctor Trujillo, en su caracterización de Brozo, el payaso tenebroso.

        Brozo, en ese programa y con su peculiar estilo, planteó que para la elección presidencial del 2024 “no hay más que dos sopas: o se vota por la dictadura o se vota por la democracia… los ciudadanos requieren de un México libre y democrático. Tenemos que resolver cómo vamos a vivir los próximos 20 años” y, obvio, la dictadura la representa el presidente López, por su creciente autoritarismo.

        El presidente aludido exhibió ese fragmento, comentando: “Si yo fuese un dictador, él no estaría diciendo esas cosas. Nosotros no perseguimos a nadie… Además, yo sostengo que en México no ha habido democracia, ha habido una oligarquía con fachada de democracia, porque la democracia es el gobierno del pueblo y para el pueblo, y eso no ha existido nunca en México.”

Y agregó el presidente López: “Rumbo a la democracia, estamos, apenas, dando los primeros pasos. La verdadera democracia es que el pueblo elija libremente a sus autoridades, y que esas autoridades atiendan al pueblo, gobiernen para el pueblo. Los conservadores piensan que la democracia se agota hasta la elección, aiga sido como aiga sido; pero para los pobres la democracia tiene una connotación distinta porque es su sobrevivencia, por eso es tan importante.”

Y ya no dice más el presidente, quedándose ahogado y perdido en sus propias palabras, frente a un Brozo que fue implacablemente claro y preciso.

Explicaré.

La postura de Brozo representa la visión de decenas de millones de mexicanos. Debe votarse (2-junio-2024) por Xóchitl Gálvez para presidente de la república (y por todos los candidatos a gobernadores, legisladores, alcaldes y su cabildo, postulados por la Coalición ‘Va por México’), porque en este momento representan a la democracia.

Y esas decenas de millones de mexicanos han considerado que, en este momento, el presidente López, y sus corcholatas para todos los cargos públicos mencionados, representan la dictadura; y están gastando del erario federal más de un billón de pesos para hacer ganar ilegalmente a sus marionetas

A partir de ahí, el mentiroso López presenta fragmentos de lo editado por Brozo, y afirma retorcidamente: “Si yo fuese un dictador, él no estaría diciendo esas cosas”.

López olvida qué, desde el momento que inició su ejercicio presidencial, dio muchos pasos para ser dictador, pero lo frenaron las instituciones democráticas que se empezaron a crear desde el sexenio del presidente Ernesto Zedillo, a iniciativa de fuerzas sociales eficaces e impulsoras de la democracia.

Esas fuerzas sociales verían destruida su calificada labor, si las elecciones de este año 2024 las ganaran las polichinelas de López, tenaz aspirante a dictadorzuelo.

Los hijitos del autócrata López, no sólo se han hecho multimillonarios de la noche a la mañana (como valientemente lo ha denunciado y documentado Carlos Loret de Mola), sino que están llevando a sus incondicionales como candidatos a los cargos públicos a elegir este año, para que Clau esté siempre cercada y maniatada por ellos.

Por eso representan a la dictadura.

Desesperado, el mentiroso de palacio, está persiguiendo a todos en víspera de la elección. Por instrucciones de López el INE ha estado retrasando la expedición de credenciales de elector que (los jóvenes, los pobres y las clases medias) ansían obtener.

El postulante a alteza serenísima y dictador vitalicio, con gran desfachatez, sostiene que “En México no ha habido democracia, ha habido una oligarquía con fachada de democracia, porque la democracia es el gobierno del pueblo y para el pueblo, y eso no ha existido nunca en México”.

Así, López traiciona a los pobres, enviándolos al habitual olvido.

Y los pasos del alevoso presidente no son rumbo a la democracia, sino rumbo a la dictadura.

En estas elecciones del 2024, quien puede seguir dando pasos rumbo a la democracia es Xóchitl Gálvez, siempre junto a los ciudadanos organizados en la Coalición Va por México.

Claudia es una marioneta; y no hay pelele con poder. El titiritero es el poderoso.



lunes, 15 de enero de 2024

LOGOS

Sergio García Ramírez

¡PELIGRA LA REPÚBLICA!

        Jurista de tiempo completo, Sergio García Ramírez hizo entrega de su artículo semanal a la Revista Siempre! (llamándola “hospitalaria”)  ya entrado el año 2024.

        Certero y académico, discierne sobre “La función judicial y quien la ejerce”; así, descifra lo qué es la administración de la justicia federal, rinde respeto a la Honorable Suprema Corte de Justicia de la Nación, y distingue las cualidades profesionales de la presidente ministra Norma Lucia Piña Hernández.

        Invoca y reconoce (en éste, su último artículo) que Beatriz Pagés se ha ocupado recientemente del tema; empero, asevera: “Sigo, pues, mis propias reflexiones y los pasos de la directora de Siempre”.

        En ese escrito, Sergio García Ramírez nos previene a todos los mexicanos: “El caudillo que predomina en México ha concebido ideas preocupantes para zanjar lo que él considera conflicto entre la ley y la justicia, entendiendo ésta ‘a su modo’ y desechando el cumplimiento puntual de la ley… ha tenido la ligereza, que rechazamos de plano, de calificar al Poder Judicial de corrupto, en bloque, sin aportar pruebas ni proveer argumentos que sostengan tan irreflexiva afirmación… Es necesario fortalecer al Poder Judicial y a quienes le sirven con acierto y dignidad. Debilitar al Poder Judicial es restar garantías a los ciudadanos y reducir firmeza al Estado de Derecho.”

        El 10 de enero del año que se inicia falleció Sergio García Ramírez. Su visión del México actual refleja su honestidad y talento. El sutil enlace que realizó (durante su vida) entre sus ascendientes y descendientes, Sergio lo buriló en su perfil humanista. Su reciente y póstumo mensaje se agradece. La amistad con él me honra, y me obliga.

        Ese “caudillo” al que se refiere (García Ramírez) es el actual presidente López; éste, carece de toda originalidad, ya que ha seguido los pasos de los variados gesticuladores, sicofantes y tartufos, que han padecido, en muy distintos tiempos, diferentes sociedades.

        Se trata de los hipócritas, impostores, corruptos, traidores y mentirosos.

Jean-Baptiste Poquelin (1622-1673), dramaturgo y poeta francés, mejor conocido como Moliére, describe magistralmente en su comedia “Tartufo”, a su personaje, en un mundo religioso en decadencia, en los tiempos de la ilustración.

        Orgón, rico burgués de París, es engañado por Tartufo; y aquél entrega, a éste, toda su autoridad. Así, Tartufo ejerce un peligroso autoritarismo, y lo encubre diciendo: “yo me debo y obedezco al cielo”.

        Claro que nuestro Tartufo en la actual política mexicana, en virtud de su circunstancia, afirma: “Yo me debo y obedezco al pueblo”.

        El Tartufo de Moliére manifiesta: “No deseo propiedades ni riquezas; y si las acepto como donaciones es para que no vayan a caer en malas manos, y las recibo sólo para auxiliar al cielo”.

Tartufo López nos ha dicho que: “No tengo propiedades ni riquezas”; “Recibimos donaciones para apoyar al pueblo”.

        El equipo de Latinus, encabezado por Carlos Loret de Mola, ha realizado una investigación documentada de cómo los hijos del presidente López, se han hecho inmensamente ricos con la obra pública y los medicamentos.

        Y el presidente López, sacado de quicio, únicamente responde atacando a Loret de que su riqueza es mayor a la de sus hijos, y retándole a que hagan permutas de patrimonios.

        Pero si el presidente López no tiene nada, ¿cómo se atreve a proponer esa permuta de la riqueza de sus hijos?

        Lo que irrita a la sociedad mexicana, entre otras cosillas del presidente López, es que ante todo México se haya hecho propietario de sus cinco corcholatas, incluyendo a la triunfadora doña Clau, se haya hecho propietario de cuatro partidos políticos, se haya hecho propietario del poder legislativo, para asuntos que no requieran de la mayoría calificada, se haya hecho propietario de tres ministras de la Corte, se haya hecho propietario de veintidós gobernadores, y se haya hecho propietario de muchos otros etcéteras, etcéteras y etcéteras.

        El 2 de junio del 2024 todos requerimos votar por candidatos que no sean propiedad del presidente López, pues peligra la república.

        México es de los mexicanos; ¡es una nación!, ¡es un país!

México no es propiedad privada de ningún Tartufo.

 


lunes, 8 de enero de 2024

LOGOS

¿Qué hacer?

ANTE DESMADRE A LA MEXICANA

Vladímir Ilich Uliánov (1870-1924), ruso, mejor conocido como Lenin, fue el indiscutible líder bolchevique de la Revolución de Octubre en 1917.

Lenin, como estratega, usó magistralmente la coyuntura histórica de la Primera Guerra Mundial para conducir, a una Rusia feudal, hacia un socialismo o dictadura del proletariado, saltándose la etapa histórica del capitalismo, y a contracorriente de lo considerado por sus guías Carlos Marx (1818-1883) y Federico Engels (1820-1895).

La visión de Marx y Engels era que al socialismo o dictadura del proletariado se llegaba por la vía del desarrollo, y no por el camino del subdesarrollo; para estos destacados pensadores, los países desarrollados iban a ser los primeros en llegar a ese socialismo: Alemania, Francia, Inglaterra, EU.

Ese llamativo logro forzado de Lenin, acaso sea una de las múltiples causas del desmoronamiento interno de la URSS, en 1991. Tarde, pero los errores se pagan.

Independientemente de lo antes expresado, Lenin, en su obra “¿Qué hacer?”, estudia los problemas candentes de Rusia desde 1902, y los conflictos dialécticos internos de los movimientos.

Y después de tener lo más claro posible el panorama, se planteó: “¿Por dónde comenzamos?”

Ciertas esencias de lo anterior debemos retomarlas para el México 2024, sin transpolar dogmáticamente circunstancias ajenas en tiempo y en espacio.

Iniciemos con un diagnóstico veraz de lo que vive nuestro país, ahora, y su aleatorio desarrollo en estos primeros cinco meses del año que transcurre.

Lo primero que se detecta en México es que hay un desorden generalizado en todo: un presidente que nada tiene de presidente; legisladores que obedecen al autócrata; el tirano tratando de acabar con el Poder Judicial Federal; gobernadores achichincles del dictadorzuelo; crimen organizado como parte del gobierno; fuerzas armadas en negociosos enriquecedores; el proceso educativo a la deriva; multimillonarios gastos electorales fuera de la Constitución y de la ley, por el capricho de un sujeto inestable y con poder; colapsado el servicio a la salud pública; millones de muertos y desaparecidos que por decisión oficial los vuelven a desaparecer; y una multitud de etcéteras.

La primera obligación del estado moderno es dar seguridad pública a todos, y a cada uno de sus gobernados. Con esto incumple el gobierno mexicano, llevándonos a una anarquía desastrosa.

Agreguemos que el poder público, al concentrarse en las manos de un solo hombre (Andrés Manuel López Obrador) se ha convertido en poder privado.

Sumemos a ello que su políticas en esta materia es “dar abrazos y no balazos” al crimen organizado; es el acusar a los criminales con su respectiva mamacita, para que se porten bien; y, consiste, en distraer a las fuerzas armadas de la seguridad pública, encargándoles negocios lucrativos y atrayentes.

A ese desmadre en seguridad pública, se suman los desórdenes en economía. Al cuarto para las doce quiere demagógicamente reformar la constitución para que los salarios suban por encima del nivel inflacionario; siendo éstos, dos conceptos sin vínculo económico para el fin pretendido. Y en materia de pensiones y jubilaciones propone lo que ya está establecido legalmente, y lo que debe hacerse es cumplir con la norma jurídica vigente.

“Primero los pobres”, aseguró el presidente del desorden. Pero ahora los primeros son los ricos de México, (los ricos que se han asociado con el autócrata del desmadre) ya que están más ricos, según datos de la revista Forbes.

Mientras, hay más millones de pobres, con todo y la maquillada gubernativa. Los pobres siguen siendo pobres, con todo y las migajas que se les dan, como pensiones, becas, auxilios y dadivas, para su consumo, y no para insertarlos en la producción.

Les da, a esos pobres, para que sobrevivan, y para que voten a favor de los candidatos del presidente marrullero, quien obsequia limosnas con el dinero de la población; es decir, el pillo Andrés saluda con sombrero ajeno.

Una atenta sugerencia para todos los que reciben esas becas y pensiones: recíbanlas agradeciéndolas a los mexicanos productivos que pagan impuestos, usen ese dinero para el bien de su familia, pero voten libremente, por quienes pueden poner orden, en esta “entropía” que ha forjado el obradorato.

La “entropía” es la unidad de medida del desorden en la segunda ley de la termodinámica; y la invoco, aquí, para apodar a ese desmadre que padecemos por la corrupción y el dogmatismo de un autócrata, a quien necesitamos frenar, con nuestra libertad crítica y nuestro voto.

Eso es nuestro “qué hacer”, en estos primeros cinco meses. Con toda mi libertad crítica he dado mi razonamiento; y el 2 de junio próximo requerimos votar en contra del desmadre que ha provocado el presidente que ya se va, con todos sus candidatos, sus títeres y sus marionetas electoreras.

 


lunes, 1 de enero de 2024

LOGOS

Ser y tiempo del presidente

VOTAR EN LEGÍTIMA DEFENSA

        “Les deseo un feliz y próspero Año Nuevo 2024”; ésta es una expresión que se dijo y se oyó, recientemente por doquier, en nuestro convulsionado mundo.

        La frase es educada y muestra sensibilidad, aunque el cuño substancial se repita año tras año.

        Sin embargo, siempre podemos encontrar emisores dudosos en su sinceridad respecto al contenido de ese buen sentimiento, en vínculo a un cierto receptor.

        Señalaré ejemplos.

        Oiríamos fingido al presidente argentino Javier Milei deseando feliz y próspero año nuevo 2024 a los trabajadores y sindicatos de su país.

        Insincero escucharíamos al primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, deseando ese feliz y próspero año a todos los palestinos.

        Mal y engañoso estaría el presidente ruso Vladímir Putin formulando votos por ese próspero y feliz año a los ucranianos.

        Al igual que observamos, como una caricatura trágica, el salaz, contradictorio y redundante, mensaje de feliz y próspero año 2024 de presidente mexicano, para todos los habitantes del país, cuando éste ha sembrado la división, la pobreza, la inseguridad, la violencia y la muerte, en todo el territorio patrio.

        Sus deseos expresos se contraponen (a la vista de todos) con sus ruines acciones.

        Con tono franciscano dijo el atroz López: “Deseo más paz y más tranquilidad”, cuando su política de “abrazos y no balazos” causa la impunidad, y ha aumentado la violencia; mientras sus acciones gubernativas siguen generando una peligrosísima intranquilidad.

        En México ni hay paz ni hay tranquilidad. Lo que hay es un mentiroso en Palacio Nacional.

        Otro de sus desfachatados deseos es: “Que la gente siga siendo muy feliz, que no sufra, que nadie se enferme, que no haya pleitos, que no haya agresiones, que vivamos en paz”, cuando la política del presidente López hace a la gente infeliz, la hace sufrir, la conduce a pleitos, la lleva a agresiones permanentes, apuesta a las rupturas entre mexicanos, y con su pésima política de salud y seguridad, públicas, ha convertido a todo el territorio nacional en el cementerio más grande del mundo.

        Y envuelto en la tragedia que ha creado, hace sus payasadas el presidente López, y a costa del erario inaugura la mega farmacia militar en suelo huehuenche, tan grandota como ineficaz, tan grotesca como absurda.

        Esa construcción del ahora depósito farmacéutico ya existía, ya que se hizo para otros menesteres, a los cuales retornará cuando esa farsa del obradorato concluya.

        Durante el actual ejercicio presidencial ha decrecido la economía y el empleo, comparado con los tres sexenios inmediatos anteriores.

        Centenas de miles de millones de pesos (del pueblo de México) se están gastando en las campañas político-electorales del tramposo López, para que ganen sus marionetas y sus títeres.

        La limpieza de las elecciones del 2024 advendrá por la ciudadanía.

El defraudador López está totalmente descalificado. Su publicidad personal nos ha salido muy costosa, y por todas partes trasuda falsedad, traición, sangre y corruptelas.

        Ése es el ser del presidente López, y ése, su tiempo, el que ha consumido en perversidades.

        Al margen de esa cloaca en la que vive el obradorato, es necesario, conforme a nuestro sistema jurídico, razonar el por qué todos los ciudadanos mexicanos saldremos a votar en legítima defensa, el 2 de junio del 2024.