miércoles, 24 de abril de 2024

LOGOS

Él y ella

CORRUPTOS Y FARSANTES

        Al menos yo, nunca he visto a la belleza ni a la justicia ni a la honradez.

        Lo que, sí, he observado son cosas bellas, he visto actos justos, y he apreciado conductas honradas.

        Vivo en el mundo de lo concreto. No existen absolutos; y la relatividad explicada por Albert Einstein se ha probado plenamente, con la añadidura de las incertidumbres cuánticas, en el macro y en el microcosmos.

        Así, belleza, justicia y honradez, son conceptos generales ontológicamente dialécticos.

        Explicado lo anterior, me referiré a la honradez en el campo de la política electoral.

        Hugo Chávez como presidente venezolano fue el primero en decir: “Yo ya no me pertenezco; yo ya le pertenezco al pueblo…”

        El presidente Andrés Manuel López Obrador plagió la frase de Hugo Chávez; y, sin citarlo, repitió: “Yo ya no me pertenezco; yo ya estoy al servicio del pueblo…”

        Plagiar es un robo, es un hurto. El deshonesto López al apropiarse de una frase que no es suya, se exhibió como un corrupto.

        La candidata Claudia Sheinbaum, sin ser presidente, y sin citar al primer plagiario ni mencionar quién produjo esa frase en principio, aseveró repitiendo: “Yo ya no me pertenezco… no puedo equivocarme… represento al futuro de la patria…”

        Como segunda plagiaria se convierte en corrupta, y rotundamente se equívoca, pues exclusivamente representa a su amo y jefe de su campaña.

        Ambos, él y ella, representan para el pueblo de México la más costosa farsa de lo que va del siglo XXI.

        Una antigua expresión describe ese dispendioso enlace: “El que te tiene te mantiene; el que te mantiene te detiene; el que te detiene te sostiene; y el que te sostiene todo lo de ti obtiene”.

        El presidente López y su candidata Sheinbaum se embrollan en sus sainetes.

        Daré un ejemplo.

        Él le endosó a ella, a Arturo Fernando Zaldívar Lelo de Larrea, quien siendo aún ministro de la Honorable Suprema Corte de Justicia de la Nación se enroló en la campaña presidencial para seguir sirviendo a los intereses del autócrata que aspira al maximato.

        Ese ministro dejó deberes pendientes en la Suprema Corte que nada tienen que ver con lo electoral. La presidente ministra Norma Lucia Piña Hernández y el ministro Juan Luis González Alcántara Carrancá, explicaron el caso profesionalmente: “Es de uso común el anonimato en el periodo de rendición de cuentas permanente en la SCJN”, y en este procedimiento el derecho de audiencia prevalece.

        Empero, el peso de su conciencia condujo a Zaldívar a la histeria, lo que desencadenó errores lamentables. Lo jurisdiccional se hizo electorero.

        El presidente le brindó todo su apoyo a Zaldívar; su candidata salió a defenderlo; el instrumento partidista de él y de ella, con sus diputados y senadores lacayos pidieron juicio político en contra de la presidente de la SCJN.

        Los diputados y senadores de oposición se aprestaron a promover juicio político contra Zaldívar. Jueces y magistrados federales, junto con los foros de abogados, de todo el país, salieron a defensar a la presidente de la SCJN.

        Se filtró que el autócrata sugirió, de una vez, que se iniciara juicio político en contra de todos los ministros de la SCJN. La oposición consideró iniciar, también, juicio político en contra del autócrata López.

        Y entonces, ese galimatías provocado por la sandez de un lelo se desinfló, con las palabras del autócrata: “Esos juicios políticos no llevan a nada”.

        Ese caos me recordó a “los borregos de panurgo”, una de las narraciones del Francois Rabelais (1494-1553), médico francés que escribió los cinco libros de Gargantúa y Pantagruel, en donde al borrego líder lo hacen que se resbale del barco y, por eso, cae al mar; empero, todos los demás borregos lo siguen, hasta el dueño de la borregada se ahogó, al ir tras de ellos.

        Total, él y ella, corruptos y farsantes, quienes ya no se pertenecen, quedarán sorprendidos, y ahogados por los votos en su contra, el 2 de junio del año que transcurre.

 


martes, 16 de abril de 2024

LOGOS

Asalto a las Afores

LÓPEZ DENUNCIA A ZALDÍVAR

        Las conferencias matutinas presidenciales (alias ‘las maña-neras’) son armas informativas de agresión y defensa del presidente mexicano; además de ser, pruebas documentales públicas, hechos notorios, fama pública y confesionales de Andrés Manuel López Obrador.

        Este ejecutivo federal está utilizando esas maña-neras para intervenir descaradamente (violando nuestra Carta Magna) en el proceso electoral 2024.

        Se le denuncia ante las autoridades electorales no por su libertad de expresión; se le reconviene por usar esas conferencias para intervenir, electoreramente, como vil jefe de campaña de todas sus corcholatas, o marionetas, las que ha asignado como candidatas o candidatos a diversos puestos públicos, entre ellos el cargo a presidente de la república.

        En su ilegal maniobreo, comete delitos al gastar, decenas de miles de millones de pesos del erario federal, para supuestamente asegurar triunfos electoreros de sus elegidas y elegidos.

        Y como López observa que le falta más dinero para su interés electorero, está promoviendo con urgencia (ante un doblegado poder legislativo) el asalto a las Afores; es decir, a los fondos para el retiro de los trabajadores, afiliados al IMSS y/o al ISSSTE, que llenen ciertos requisito de edad y abandono de sus ahorros.

La cantidad que requiere el obradorato, por ahora y de prisa, es de 40 mil millones de pesos.

        Por otro lado, la desesperación de López lo ha conducido a proponer, ante ese lacayuno poder legislativo, reformas substanciales a la Ley de Amparo, para suprimir la suspensión provisional y la definitiva de todo acto de autoridad reclamado.

Así pretende destruir la esencia del amparo, con grave afectación a los quejosos, y limitando al Poder Judicial Federal, al que no ha podido someter el autócrata presidente.

        Hoy, más que nunca, por bien de la democracia, y de una auténtica división de poderes, todos los mexicanos necesitamos defender al Poder Judicial presidido por la ministra Norma Lucia Piña Hernández, quien con una mayoría de ministros que ejercen la soberanía nacional en materia de Derechos Humanos, garantizados constitucionalmente, han actuado, aplicando las normas jurídicas con dignidad profesional.

        Por cierto, el presidente López fue quien denunció, en una de sus maña-neras, a quien fuera un rastrero presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación: Arturo Fernando Zaldívar Lelo de Larrea.

        López confesó que en muchos casos, él le hablaba a Zaldívar para que los jueces y los magistrados resolvieran como el presidente se los exigía. Así descalzonó públicamente a su cómplice.

        Seguramente por eso, y por denuncias que ahora se denominan anónimas para proteger en inicio a los denunciantes, en virtud de la naturaleza grave que tienen los casos, se han fincado investigaciones en contra de Zaldívar y un puñado de sus principales colaboradores, debido a sus supuestas conductas ilícitas.

        La Suprema Corte de Justicia de la Nación, con toda imparcialidad, en éste, como en todos los casos, debe aplicar la ley al asunto concreto con interés controvertido.

        Frente a la conducta responsable y profesional de la Suprema Corte, López, el suspirante a dictador, confiesa sus ilícitas componendas con los empresarios para condonarles, supuestamente, cantidades millonarias, si pagan de inmediato los montos multimillonarios a que los sujeta, quebrantando la Ley de Ingresos de la Federación, en su vigencia de años fiscales a que correspondan.

        En su decadente ejercicio, López exige más poder. Pide que le amplíen su facultad para indultar a cualquier delincuente que ya se encuentre con sentencia ejecutoria.

        ¿Favorecería a narcos, colaboradores, familiares, amigos, socios, cómplices?

        Cada día es más voraz el autócrata López.

Han llegado hasta la ridiculez el presidente López y su corcholata Claudia Sheinbaum; ésta se desgañito: “Hoy tenemos al mejor presidente que ha tenido el país, Andrés Manuel López Obrador”.

¿Y Juárez, y Madero, y Cárdenas? 

Claudia, claudicó; ya desbarrancó hacia la locura del elogio.

 


lunes, 8 de abril de 2024

LOGOS

Ignorancia jactanciosa

MIASMAS DE LA ANTIDIPLOMACIA

        Los ciudadanos en registro electoral en nuestro país son, actualmente, 99 millones, ochenta y seis mil veinte.    

20 mil 708 cargos públicos (federales, estales y municipales) son objeto de la elección mexicana del 2 de junio próximo.

Dentro de los políticos que ocupan esos cargos, y los prospectos candidatos. a elegir, encontramos de todo.

Sin embargo, la supina ignorancia ha tenido un avance vertiginoso en el pensar, el decir y el hacer, de nuestros políticos actuales; y, con la reelección, han logrado estacionar en el gobierno su incompetencia, aumentando su voracidad, en el océano de las corruptelas.

Desde luego existen excepciones, pero son eso, raras avis.

El presidente argentino, Javier Gerardo Miley, señaló en una reciente entrevista: “Es un halago. Y aunque un ignorante como López Obrador hable mal de mí, me enaltece”.

Esa respuesta fue motivada por la imprudencia del presidente mexicano al aseverar: “La victoria del ultraderechista Milei se trata de un autogol argentino. Ignoro cómo ganó”.

        Y claro, Milei observó la confesión de López: “Ignoro”; y quién revela que ignora, se convierte en un ignorante, al menos respecto al caso.

        Empero, durante más de cinco años en el autocrático ejercicio del poder, la ignorancia de Amlo ha conducido a México al desastre.

        Y su ignorancia, la ha llevado a grado de jactancia, convirtiéndola en contagiosa.

        Al presidente López la diplomacia. Su ignorancia en las relaciones exteriores ha llevado a México al desastre.

        El jefe nato de nuestra política exterior es camorrista y de barriada.

        Durante muchos años el cuerpo diplomático mexicano fue nuestro orgullo: Gozaban nuestras doctrinas y aportaciones, en este campo, del reconocimiento internacional.

        Empero, el actual presidente ha destruido todo lo que concierne a la Secretaría de Relaciones Exteriores; sus funcionarios son improvisados, sacados al azar en el revoltijo del obradorato.

        Los ardides internacionales e incoherentes de López han dirigido a nuestro país a confrontar o reñir con una gran cantidad naciones: EU, España, China, Perú, Bolivia, Panamá, Rusia, Argentina, Ecuador, Ucrania, Israel, UE, Canadá, El Salvador, Colombia, entre otros.

        El presidente Trump humilló al presidente López al aseverar: “Nunca había visto a un mandatario doblegarse tan servilmente”.

        Ante tamaña afrenta, López Obrador ni pío dijo.

Ahora, el candidato republicano a la presidencia de EU vuelve a sus balandronadas: “El presidente mexicano pide para el problema de la migración más de 20 mil millones de dólares, yo no daré ni 10 centavos a ese abusivo”.

Y otra vez, doblegado por las bravatas de Trump, el presidente López Obrador guarda vergonzoso silencio.

Recién se metió con Ecuador, y provocó una infortunio.

Qué torpeza la del presidente mexicano de meterse en el proceso electoral de Ecuador. Incluso, con estúpido desaseo describió el asesinato de Fernando Villavicencio, un candidato presidencial de minorías. La viuda de éste se vio obligada a exigirle al presidente mexicano respeto para el fallecido.

El actual presidente del Ecuador, Daniel Novoa declaró non grata a la embajadora mexicana en ese país, Raquel Serur: y México declaró rotas las relaciones entre los dos países, al ser allanado el recinto de la embajada mexicana en Ecuador, por parte de sus fuerzas armadas, para aprender a Jorge Glas, ex vicepresidente del Ecuador refugiado en ese espacio que, jurídicamente, forma parte del territorio mexicano.

El presidente del Ecuador violó principios del derecho internacional público. ¡No hay duda en ello!

Pero, su grave falta, no exime de responsabilidad al presidente López, puesto que éste, es generador de muchas miasmas, por su conducta antidiplomática.

Por cierto, el mismo presidente López es responsable de la debacle nacional; ante esta verdad a la vista de todos, los debates entre los candidatos presidenciales son formalidades secundarias.

Por otra parte, el eclipse de hoy, en Morelia, será parcial, el sol ocultará el 84.4 por ciento de su masa. Y durará este evento de las 10 horas 52 minutos, a las 13 horas con 34 minutos.

Todos debemos gozar el evento, y cuidarnos la vista. Aprendamos, además, que no hay ningún poder que no se eclipse.

 


lunes, 1 de abril de 2024

LOGOS

800 mil muertos

DÍA MUNDIAL DE LA SALUD

        Oficialmente el gobierno mexicano ha reconocido que por motivos del Covid-19 hubo, en nuestro país, 800 mil muertos”.

        Sin embargo, y lamentablemente para México, la Organización de las Naciones Unidas (ONU), a través de la Organización Mundial de la Salud (OMS), precisó que, en nuestro territorio patrio, acaecieron más de un millón doscientos mil fallecidos por ese virus.

        Respecto al tema, la candidata presidencial Xóchitl Gálvez dijo: “El doctor Hugo López-Gatell, en algún momento, debe enfrentar a la justicia por el exceso de mortalidad durante la pandemia de ese covid”.

        Eso significaría que tal mortandad no fue sólo por covid, sino por una inadecuada política de salud pública federal.

        Y habrá que investigar si fue exclusivamente la responsabilidad de López Gatell, o si hubo culpa, sobre todo, del presidente López Obrador.

        Obvio, en contra de esos dos López deben aportarse pruebas; y, para ello, las mañaneras proporcionan evidencias suficientes: fama pública, documentales públicas y hechos notorios.

        En varias de esas mañosas conferencias el presidente Amlo aseguró: “El covid es una invención de los conservadores; sólo les da a los ricos; ese virus yo lo he frenado un este amuleto que es un detente al maligno; me basta sacar este billete de dos dólares para vacunarme en contra de ese bicho; no se requieren vacunas que nos quieren aplicar fuerzas neoliberales y extranjeras; al pueblo no llegará ese contagio; estaremos a salvo de ese mal si no mentimos, ni robamos ni traicionamos; nada de cubrebocas, nada de vacunas; no es tan dañino, es simple catarrito, ni siquiera es equivalente a la influenza; lo del coronavirus son videos falsos con información falsa, la pandemia del coronavirus nos llegó como anillo al dedo; etc., etc., etc.,”.

        La síntesis que he transcrito corresponde a las expresiones del presidente de la república, en los años 2019 y 2020; y todo ello constituyó la política de salud oficial de la federación, para el caso de esa pandemia viral.

        La cual, al ejercerse dogmáticamente por la autocracia, convirtió a esos dos López (al presidente y al subsecretario de salud) en una eficaz fábrica de cadáveres, generadores de orfandades y viudeces a destajo.

        ¡México no lo merecía!; ni lo merece.

        Y parodiando al Primer Ministro Británico y Premio Nobel de Literatura 1953, Winston Churchill (1874-1965), podríamos concluir que en México y en materia de salud pública, nunca tantos, han debido tanta dolorosa muerte a tan pocos.

        Entre dos López, mataron a un millón doscientos mil humanos; más de los fallecidos en la Revolución Mexicana.

        Por cierto que a Churchill, agudo y brillante escritor, le debemos una de las más puntillosas definiciones de lo que es la salud.

        Él escribió: “La salud es un estado transitorio de bienestar que, entre dos épocas de enfermedad, no presagia nada bueno.”

        En fin, por lo que se refiere al presidente López, seguramente que el próximo día 7 de abril, aprovechando que es el Día Mundial de la Salud, nos dirá su frase machacona y favorita: “Pronto tendremos en México una salud como la de Dinamarca; ¡mejor que la de Dinamarca!”.

        Creo que muchos nos hemos preguntado, ¿el presidente López sabrá lo que dice?, porque no se da cuenta de lo que hace.

 


lunes, 25 de marzo de 2024

LOGOS

Una peón a reina

LA ESTUPIDEZ NO VENCERÁ

        El poder de 9 billones del erario federal, la cúpula cómplice de las fuerzas armadas, el crimen organizado con cabeza gubernativa, la bien cebada servidumbre de medios de comunicación masiva a favor del tirano, y una multitud de despistados, suponen que ganarán la elección presidencial del 2 de junio del 2024, en un México cada día más consciente y activo.

        A ese México reflexivo y dinámico de más de 70 millones de mexicanos que han tomado las calles, las plazas y las conciencias del país, con inteligencia y con orden (sin acarreo de ninguna especie, sin pintar paredes ni destruir puertas, sino con un gran respeto y humanismo), el porvenir le pertenece, ya.

A nadie ofenden, y todos quedamos, orgullosos, motivados por su existencia.

        Frente a esa sociedad organizada y en marcha (a su manera), nos encontramos con la estupidez de un presidente autoritario, ególatra y adocenado, en todo lo que dice y hace.

        Por órdenes del presidente Amlo, la secretaria Alicia Bárcena de Relaciones Exteriores confesó en una mañanera: ”Acabamos de firmar un convenio con el presidente Nicolás Maduro. Nuestro gobierno les está dando a cada venezolano 110 dólares al mes, durante seis meses, del Programa de Jóvenes Construyendo el Futuro.”

        Ese acto de autoridad del gobierno mexicano (aparte de constituir varios delitos), viola derechos humanos garantidos por el artículo 13 de nuestra Carta Magna: “Ninguna persona o corporación puede… gozar más emolumentos que los que sean compensación de servicios públicos y estén fijados por la ley”.

        Además, arrastra ese acto de autoridad un sinnúmero de ilicitudes. ¿Tiene atribuciones el presidente para estos convenios?, ¿el senado los conoce?, ¿por qué sólo son venezolanos y no con todos los migrantes, incluidos los mexicanos?

        Como todo el estragado mundo de Amlo pasa en las mañaneras, el presidente aseguró en una de ellas: “… hago un llamado a los migrantes en los EU para que no voten por ningún partido, ni por ningún candidato a cualquier cargo, que sean antiinmigrante o estén en contra del pueblo de México; o el qué diga que los mexicanos y los migrantes son una amenaza para EU. Voten por quien ofrezca, por escrito y firmado, regularizar la migración mexicana y les dé ciudadanía estadunidense. Éste es el primer tema, pero les seguiré diciendo por quién voten y por quién no.”

        Olvida el presidente mexicano que el principio de reciprocidad opera en el derecho internacional.

Así que su intervencionismo de aquí para allá está provocando y aceptando el intervencionismo de allá para acá, en una elección mexicana tan delicada como ésta, de 2024.

Para colmo, el llamado internacionalmente “narcopresidente”, aseveró en su diario oficial, alias la mañanera: “No vamos a actuar como policías de ningún gobierno extranjero. No lucharemos contra los cárteles, ni menos por órdenes de EU”.

Pero qué necedad del presidente de ejercer la diplomacia con estridencias de un golpistas de barriada.

El presidente mexicano me recuerda a Pepe Ronzal, un personaje en la novela de ‘La Regenta’ del español Leopoldo Alas “Clarín” (1852-1901).

Ronzal ejercía su poder con la fuerza bruta, frente a la razón; y hasta jugando al ajedrez, a capricho y chanchullo, llevaba a una peón para convertirla en reina, listo a tirar puñetazos, al tiempo que disponía: “A reina va, y lo hago cuestión personal”.

Y en el presente, en la realidad mexicana, el presidente impuso, por su ocurrente antojo, a una peón como candidata presidencial de sus maniobrables partidillos.

Por cierto, respecto a España, el presidente mexicano se lanzó en contra del Rey Felipe VI: “No hay buena relación con ese monarca, que anda recibiendo y premiando a una señora buscadora, ya que fue a acusarme con él. ¡Imagínense!, acusarme a mí”.

Aseguro que no pueda existir la estupidez eternamente.

Creo que, en México 2024, la estupidez no vencerá.

 


martes, 19 de marzo de 2024

LOGOS

¡Pobre tirano casero!

SEMBRÓ VENDAVALES; COSECHA MALES

        El actual crimen organizado de nuestro país, en su faceta de narcotráfico, tiene sus raíces en necesidades gringas, respecto a su participación en la Primera Guerra Mundial.

        Los estimulantes de la marihuana condujeron a los soldados yanquis a la furia bélica de matar al enemigo en turno; en aquel entonces a los alemanes.

        La necesidad de drogas en EU creó un mercado exigente, y motivó la producción de ellas en territorio mexicano.

        Desde esa cepa, y con su proceso dialéctico de más de un siglo, llegamos a la caótica, desbordada y enredada, situación del 2024.

        Dentro de esta realidad, y en el inicio de la campaña presidencial, Xóchitl Gálvez impone tema:

“El gobierno de Andrés Manuel López Obrador pactó con la delincuencia. Este gobierno pactó con los narcotraficantes. Este gobierno fue a saludar a la mamá del ‘Chapo’. Este gobierno soltó a Ovidio Guzmán. ¿Qué más evidencia quieren?”

Y sacándole al bulto real y pesado, Claudia (la consentida marioneta de nuestro tirano doméstico) contestó sesgadamente:

“El que pactó con el crimen organizado fue el presidente Felipe Calderón.”

Xóchitl volvió sobre ese asunto, pero ahora dirigido contra Claudia:

“Hago un llamado a Claudia para que informe quién pagó sus multimillonarios espectaculares dentro y fuera de nuestro país. Y si fue o no el crimen organizado.”

Y Claudia volvió a morder el anzuelo:

“No sé quién los pagó. Desconozco el origen de estos espectaculares.”

La respuesta de Xóchitl fue:

“Yo estaría preocupada, e investigaría quién pagó esos espectaculares, y quién paga los costosos acarreos de masivas reuniones intrascendentes de Claudia.”

Esas confrontas son indicios característicos de las contendientes presidenciales; sin embargo, el fondo del problema es de mayor envergadura.

Desde el presidente José Venustiano Carranza de la Garza (en 1917), hasta el presidente Ernesto Zedillo Ponce de León (en 2000) el negocio del crimen organizado en su forma de narcotráfico tuvo cauce y control del gobierno.

Empero, la llegada del siglo XXI y la pérdida del poder presidencial por parte de un gobierno con un partido hegemónico (PRI), desajustó la vertiente y la intervención gubernativa.

Esa causa detonante no es única, pero sí suficiente para la cascada de motivos nacionales que se provocaron con ella; impulsos que se mezclaron a fenómenos internacionales mundializadores de todo lo bueno y lo malo generado en un planeta convulso y masivo.

En síntesis, en esos lodos pestilentes nos encontramos.

El expresidente Vicente Fox Quesada es quien se inscribió como número uno en la lista de los aspirantes a producir droga. El expresidente Felipe de Jesús Calderón Hinojosa, a propuesta del gobernador michoacana Lázaro Cárdenas Batel, declaró tontamente la guerra al narco. El expresidente Enrique Peña Nieto, hundido por su pésimo y frívolo gobierno, nada en escondidas aguas extranjeras.

Y si íbamos mal, peor nos ha ido con la narco política del presidente Andrés Manuel López Obrador: más mentiras, más traiciones, más corrupción, más ignorancia, más asesinados, más militarización, más inseguridad, más pobreza, más drogas, más ineptitud en la salud y en la educación, más narcos, más inmoralidad.

El talentoso poeta uruguayo Mario Benedetti (Mario Orlando Hardy Hamlet Brenno Benedetti Farrugia, 1920-2009) escribió algo que le queda a la medida a Andrés Manuel López Obrador:

“Pobre señor presidente, ya no hay nadie que lo aguante; nunca hubo aquí gobernante con menos dedos de frente… Y ya que todo le falla, y no hay que tener rencor, yo opinó que lo mejor, lo mejor es que se vaya.”

Y con ese presidente, su marioneta Claudia con su lastre debe irse, y de liso, pues quiere a ese desastre, ponerle segundo piso.

 


lunes, 11 de marzo de 2024

LOGOS

Carta sin réplica

¿’GRACIAS’?; PURAS DESGRACIAS

        Héctor Manuel Ceballos Garibay (1958-2020) nació en Uruapan, Michoacán, en el hotel ‘al pie de la sierra’, en donde se encontraba el hogar y la empresa turística de sus padres.

        Estudió en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México, hasta obtener su doctorado en sociología.

        Escritor y maestro, Héctor fue persona sobresaliente, siendo reconocido, entre otras formas, en una obra de gran formato que presentó a 50 michoacanos en los primeros lustros de este siglo XXI, quienes fueron declarados (por el gobierno del Estado) “Tesoros Vivos de Michoacán”.

        Murió (Ceballos Garibay) por su libre decisión, en el sitio de su origen, dejando una carta firmada y dirigida “A LA COMUNIDAD DE URUAPAN, A MIS AMIGOS Y FAMILIARES DE TODA LA REPÚBLICA MEXICANA”, en donde textualmente externó lo siguiente:

“Por medio de la presente hago responsable de mi suicidio a AMLO, el peor presidente que ha tenido este país. Debido a sus políticas retrógradas y a su delirio de grandeza (vive en otra realidad; sus propias fantasías), este país se ha ido a la debacle social y económica, como lo demuestran los datos duros del año pasado.”

“De haber tenido un verdadero líder, con políticas de confianza a la inversión y a la productividad, hubiéramos estado en mejores condiciones de fortaleza para enfrentar la crisis sanitaria causada por el Coronavirus a nivel mundial.”

“El viacrucis que vivirá este país apenas comienza, y las malas decisiones del gobierno se traducirán en una catástrofe que irá en aumento y durará muchos meses. Habrá desempleo, pobreza, violencia delictiva, odio de clases y probablemente un gobierno dictatorial.”

“No quiero vivir más con estas perspectivas que presupondrán un escenario de caos y zozobra. Me niego a ser testigo de este pequeño apocalipsis nacional que les espera a los mexicanos”.

“Sé que mi hijo Emiliano está preparado educativa y emocionalmente para salir al paso de estas adversidades. Estoy orgullosos de él en todos los sentidos. Él sabrá comprender las razones de mi decisión. Lamento perderme de su compañía. A todos los familiares y amigos, les deseo la mejor de las suertes y les expreso mi cariño.”

“Atentamente: Héctor Ceballos Garibay”

“ABRIL 2020, Uruapan, Michoacán.”

“P.D. DESEO QUE MI CADÁVER SE INCINERE EN UNA CAJA SIMPLE, QUE NO HAYA NINGÚN TIPO DE CEREMONIA FUNEBRE (POR PROTECCIÓN SANITARIA) Y QUE MIS CENIZAS SE ESPARZAN EN EL JARDÍN DE MI CASA.”

        ¡No haré jamás el elogio al suicidio!, mi sentir y mi razonar estarán siempre a favor de la vida, en su más amplio y dialéctico sentido.

        A mi parecer, ese fenómeno patológico ha encontrado infinidad de explicaciones en las áreas de la psiquiatría, sociología, filosofía, literatura, psicología, historia, cultura, religión y derecho, pero nunca justificantes decisivas.

        En textos del Viejo Testamento, en la Ilíada con ese pelida Aquiles, en libros de Platón, Aristóteles, Séneca, Epicteto, Cicerón, Marco Aurelio, Epicuro, Tomás de Aquino, Montaigne, Hegel, John Donne, Rousseau, Hobbes, Locke, Hume, Kant, Spinoza, Kafka, Goethe, Víctor Hugo, Freud, Durkheim, Schopenhauer, Rilke, Bertrand Russell, Albert Camus. Alfonsina Storni, Beckett, Foucault, Adler, Frankl, todos estos autores, y más, nos hablan del suicidio, a través de sus escritos y su vida.

        Respeto la decisión que tomó, en su momento, mi amigo Héctor Ceballos Garibay. Lo echaremos de menos, con su voto, en las urnas de este año 2024.

        Acaso, algún día, Andrés Manuel López Obrador conteste y replique la carta de Héctor.

Los nuevos lectores de esta carta, también se formarán un juicio.

En el libro que firma Andrés Manuel, titulado ‘Gracias’, debió ser la oportunidad para que hablara de esta misiva; aunque en la realidad, no encontramos ninguna gracia, sino puras desgracias.

Durante su reciente mañanera en Morelia, Amlo pertrechado en un cuartel, debió recordar públicamente esa carta.

En el costosísimo acarreo de su corcholata Claudia en el Estadio Morelos en Morelia (el mismo día de la visita de su jefe de campaña; ¡qué coincidencia!) debieron leer la carta de Héctor, y entonces, sí, la gente hubiera concurrido.

¡Esa carta sigue viva!

 


lunes, 4 de marzo de 2024

LOGOS

Xóchitl les madrugó

LA TOMA DE ZACATECAS

        El ansia por obtener el poder, o por conservarlo, motiva a cada persona a producir sus propias mentiras, o a generar sus insolentes verdades.

        Mostraré un expresivo caso.

        Era un profesor normalista, cuarentón, destacado en el basquetbol, fumador empedernido, de baja preparación académica, buen padre de familia, de filosa lengua viperina, que logró colarse bajo la sombra protectora del gobernador en turno.

        Su lugar de origen fue un pequeño municipio hacia el oriente michoacano, del cual salió huyendo su familia, siendo niño el personaje que cito.

        Eran los tiempos en que la verdadera lucha electiva se daba dentro del Partido Revolucionario Institucional, para lograr ser candidato; una vez alcanzado este triunfo, el cargo elegible estaba seguro, y salvo en rarísimas excepciones podía perderse.

        Aconteció, entonces, que el gobernador se empeñó en que ese profesor fuera diputado federal por el distrito electoral donde había nacido, lo que motivó reacciones adversas en la población.

        Ese profesor, ya candidato del PRI, inició e hizo toda su campaña prometiendo una sola cosa, la que repitió con exactitud y llaneza: “Una vez diputado, nunca volveré a este distrito”.

        Y lo cumplió. Nunca retorno a ese distrito electoral.

        El fenómeno político en México, con sus múltiples cambios formales, sigue tan terco como lo observó el poeta zacatecano Ramón López Velarde (1888-1921), en su ‘Suave Patria’: “Trueno de temporal, oigo en tus quejas crujir los esqueletos en parejas. Oigo lo que se fue, lo que aún no toco. Y la hora actual con su vientre de coco; oigo en el brinco de tu ida y venida, ¡oh, trueno!, la ruleta de la vida.”

        Y Xóchitl Gálvez les madrugó a sus pares en varios sentidos. No desperdició tiempos, inició su campaña en el primer minuto del 1 de marzo del 2024; y lanzó el trueno de temporal, en el lugar dónde son más crueles los fabricantes de cadáveres por extinción de mexicanos. Retándoles en su ida y venida: “La gente aquí tiene miedo, porque este sexenio es el más violento de la historia. Morena es más narco, más muerte y más miedo. Todos unidos podemos vencerla. Vamos a dar la orden de investigar y perseguir a la delincuencia. Óiganlo muy bien aquí, se acabaron los abrazos para los criminales. Morena defiende la soberanía de los cárteles, yo defiendo la soberanía de los mexicanos. ¡Se aplicará la ley!, en todo México.”

        Bajo toda proporción guardada, Xóchitl reafirmó, a 110 años, la Toma de Zacatecas, del mismísimo Pancho Villa.

        Claudia, la mayor corcholata del presidente, citó para su arranque a las 16 horas de ese 1 de marzo, con un acarreo masivo de todo el país. Dio pasaje, dinero, torta y refresco. El principal objetivo de la concentración (tan deslucida, carísima y desorganizada) fue un respaldo al presidente narco marcado, fue un empiece de campaña de Brugada en CDMX, fue un respaldo a los gobernadores de morena, y al resto de los candidatos morenistas. Fue todo un revoltijo mal oliente.

        A Claudia se le enredaron las neuronas, o la traicionó su subconsciente, al asegurar: “Sólo hay dos caminos a tomar este 2 de junio; uno, que siga la corrupción… transformación, el otro, que regrese la corrupción…”; o sea, ¿por cuál corrupción votarás?

        Brugada y Claudia coincidieron en sus palabras finales, subrayando el obvio vasallaje: “¡Que viva el presidente López Obrador!” Duda no existe: el amo es amo, y seguirá siendo el amo vitalicio.

        Respecto al fosfo-fosfo, esquirol del obradorato, no pinta en la cartelera. No perdamos el tiempo con él.

        El único “FOSFO-FOSFO” que sigue siendo un peligro, es el presidente, quien, en su carácter de jefe nato de campaña de su corcholata predilecta, prosigue en su proyecto de elección de estado, con su enjambre de mentiras e ilícitos; vamos, es la primera opción que ve Claudia: “Que siga la corrupción… transformación”. Más de lo mismo; o lo mismo, pero más.

Empero, sujeto a una promesa parecida a la de aquel profesor convertido en diputado, si votan por mí, les prometo que no volveré jamás, después de concluido mi mandato, a la política militante electoral.

Simplemente, porque no se puede estar siempre en la cima del poder. Apenas llegamos a lo más alto, y estamos destinados a bajar. La subida es ya un compromiso de descenso. El gozo de elevarse es un resarcimiento anticipado por la tristeza y soledad de la caída.

¡Entendámoslo todos!; entiéndelo, Andrés Manuel.

 


lunes, 26 de febrero de 2024

LOGOS

De mañanera a confesionario

¿QUÉ LE HIZO EL VIENTO A JUÁREZ?

        El cinismo del presidente se ha exacerbado; y en sus conferencias mañaneras ha hecho desahogo confesional que lo incrimina.

        Confesó: “Ha crecido mucho la delincuencia. Se dejó crecer desde hace años, y echaron raíces los cárteles. Ahora entraron y tomaron Chilpancingo; y ordené (para no provocarlos, porque eran muchos) el retiro de nuestras fuerzas armadas. ¡Es mejor no confrontarlos!”

        Esos mandatos de huida, dispuestos por el jefe nato de las fuerzas armadas de México, son para entregar las plazas a la delincuencia organizada, como parte de la política de seguridad pública decretada: “Abrazos y no balazos”.

        Esas compacientes entregas de plaza, y el real aumento de todos los delitos en nuestro país, por más que lo oculten o lo distorsionen oficialmente, conducen a la gente a pensar en un gobierno narco.

        Y esa fama delincuencial (que él mismo se generó) ha enfurecido al presidente confeso, quién teme más a la justicia de los EU que a la justicia mexicana.

        Confesó también: “Cuando estaba como presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación el ministro Arturo Zaldívar, yo hablaba telefónicamente con él, y le decía de los casos. Él, daba instrucciones a los jueces o a los magistrados; incluso, cuando las averiguaciones previas de los ministerios públicos estaban defectuosas, se corregían.”

        De esa forma, el presidente descalzonó a quien fuera ministro presidente (Arturo Zaldívar) Lelo de Larrea, quién por más que ahora explique lo inexplicable, sobre esas constantes llamaditas telefónicas, ha perdido totalmente el respeto que se le tenía a ese lelo, pues hoy, por hoy, oficia de matraquero en la campaña electorera, cara e inservible, de la corcholata mayor del presidente.

        Esa confesión presidencial también implica delitos en contra de la administración de la justicia.

        Además, el presidente lanzó la confesión respecto a la jefa de la corresponsalía del periódico The New York Times, Natalie Kitroeff, de quien hizo públicos sus datos personales, con toda malévola intención, en un país en donde la vida de los periodistas peligra constantemente.

        Así dijo el aspirante a dictador: “No los puede uno tocar ni con el pétalo de una rosa. Son hampa del periodismo. Deberían ofrecerme disculpas. El pueblo de México merece respeto”.

        Y otra vez el presidente se victimiza. Goza haciendo el papel de víctima. Considera que él es el pueblo de México. El NYT denuncia a las personas supuestamente receptora de dólares del narco, no al pueblo de México. No es contra nuestro país, es respecto a un mal presidente que no ha sido digno.

En su enojo, el presidente aseguró: “Mi autoridad está por encima de la ley”, lo que a todas luces no puede ni debe ser.

Sin embargo, al confesar tamaña burrada y atrocidad, actualiza ilícitos con esos actos que, según él, y por ser emanados de él, son de jerarquía superior a toda norma jurídica.

        Confesó, por igual: Ordené a la Secretaría de Marina y a la Secretaría de la Defensa Nacional fueran a Panamá a buscar y a localizar los restos de Catarino Erasmo Garza Rodríguez, general de la revolución mexicana que desapareció en el siglo XIX en aquel país.

        En el México actual tenemos cerca de 120 mil desaparecidos que aumentan en número día con día, y, en nuestro territorio, existen grupos de buscadoras que piden ayuda para su heroica labor, sin ser recibidas ni escuchadas por el presidente.

        Bajo esa realidad, resulta absurdo e inexplicable la costosa búsqueda gubernativa de don Catarino.

        Total, la estupidez llegó a cierto cerebro que ha convertido su mañanera en un confesionario, donde el desahogo presidencial revela diversos ilícitos, trágicos unos, cómicos otros.

        Y el presidente sin escrúpulo alguno, pudiendo ser enjuiciado en EU y/o en México por supuestos delitos, sólo desatina al afirmar: “Me hacen lo que el viento a Juárez”.

        Pero hay quienes afirman que, en secreto, ya ordenó el presidente invertir varios millones de pesos para pagar a los investigadores designados sus hijos, a efecto de que le informen con toda exactitud, “qué le hizo el viento a Juárez”; todo esto por si las dudas, o por aquello del no te entumas.