lunes, 29 de abril de 2019


LOGOS
Batalla de Puebla
EL OBJETIVO DE FRANCIA ERA EU
       Carlos Marx en El 18 brumario de Luis Bonaparte pinta, a éste, de manera diferente a como lo hace Víctor Hugo, y de forma opuesta a como lo describe Pedro José Proudhon: "Yo, por el contrario, demuestro cómo la lucha de clases creó en Francia las circunstancias y las condiciones que permitieron a un personaje mediocre y grotesco representar el papel de héroe".
       10 años después de publicada la obra de Marx, ese personaje mediocre, como Napoleón III emperador de Francia, designó a Federico Forey comandante general del cuerpo expedicionario francés a México.
       Y le dio instrucciones precisas y escritas: "En el estado actual de la civilización mundial, la prosperidad de América no puede dejar indiferente a Europa, pues América alimenta nuestra industria y da vida a nuestro comercio… no tenemos ningún interés en que la República de los Estados Unidos llegue a apoderarse de todo el Golfo de México, dominando las Antillas y la América del Sur, y venir a ser la única dispensadora de los productos del Nuevo Mundo. Dueña de México y por consiguiente de América Central y del paso entre los dos océanos, no habría más potencia en América que los Estados Unidos… Si por las armas de Francia se constituye allá un gobierno estable, al menos habremos construido un dique infranqueable contra las invasiones de los Estados Unidos…"
       España e Inglaterra, aliados iniciales de Francia en esa aventura, al darse cuenta de la codiciosa intención retiraron a sus tropas desembarcadas ya en territorio mexicano.
       Eficaz trabajo diplomático realizó el embajador de nuestro país en Francia, quien al salir de esa nación entregó al gobierno napoleónico una nota de despedida y protesta, la que se publicó en la prensa inglesa, y circuló por Europa.
       El texto firmado por nuestro embajador Juan Antonio de la Fuente, en aquel entonces, es digno de publicarse íntegro ante los problemas de nuestros días.
       Dice: "México podrá ser conquistado, pero no sometido… Tal empresa será ruinosa y terrible para nosotros, pero lo será más para sus promovedores… México es un pueblo que defiende sus derechos con dignidad."
       Para denigrar a México publicaron en Europa las cartas entre Charles Wyke y Manuel María Zamacona, como Libro Azul Mexicano: "La población de México es tan envilecida que constituye no sólo un peligro para sí misma, sino para quienes se pongan en contacto con ella". Marx y Engels leyeron estas misivas, juzgando "canallas" a los autores de "este material de brutalidad británica", dudando que fueran "¿Homo sapiens?"
       Al inicio de la invasión francesa se dio la Batalla de Puebla, el 5 de mayo de 1862, con triunfo de México por varias causas. El ejército mexicano "desarrapado", dirigido por Ignacio Zaragoza, logró la gloria.
       Al final, el 19 de mayo de 1867, con triple fusilamiento, en el Cerro de Las Campanas, se restableció la República Mexicana, y EU se salvó del peligro napoleónico en su contra.

lunes, 22 de abril de 2019


LOGOS
Superior a la Constitución
LO QUE DIGA MI DEDITO
       El presidente Andrés Manuel López Obrador impuso la moda de gobernar al país a punta de escándalos constantes.
       Gusta de provocar alboroto para ser la nota principal de todos los medios, no importa el daño que cause.
       No se le da a AMLO la discreción; le bulle la glotonería por los jaleos y, así, no podrá nunca ser coagulante de la unidad nacional, tan urgente en este tiempo de acechanzas extranjeras.
       Éste será un sexenio perdido para rubros importantes, pero no será aburrido.
       Además, el presidente AMLO tuitea. Los actos de autoridad importantes no se denotan en la carta magna, leyes, reglamentos, decretos, acuerdos y órdenes, sino a través del tuiter, o de un simple memorándum, aunque éstos contengan asuntos oficiales del ejecutivo federal, y configuren actos unilaterales, imperativos y coercitivos.
       Todo documento que firma el presidente (con el contenido del memorándum inolvidable de semana santa 2019) debe ser firmado también por los secretarios del ramo que corresponda, ya que "sin este requisito no serán obedecidos", así lo ordena el artículo 92 de la constitución federal.
       Miente AMLO al asegurar que en ese memo sólo se tratan problemas internos, pues contiene asuntos graves de efectos externos.
       Un día sí, y otro también, el presidente AMLO muestra ignorancia, la que se observa claramente por la personal destreza que ejerce para exhibirla.
       O no tiene colaboradores capaces que le expliquen con honradez valiente; o AMLO en su soberbia dice y hace como si lo supiera todo. En ambos casos se afecta a México.
       Con desgaire, el audaz AMLO lanza otro mensaje cibernético: "Callaron como momias cuando saqueaban y pisoteaban los derechos humanos y ahora gritan como pregoneros que es inconstitucional hacer justicia y desterrar la corrupción. No cabe duda que la única doctrina de los conservadores es la hipocresía. Son como sepulcros blanqueados".
       Esa colérica e ilógica respuesta ni explica ni justifica su ineptitud ni su marimorena táctica. Sus errores dañosos y objetivos están ahí, como siguen ahí los vicios y equívocos de sus antecesores; nada más que éstos nos los presumían tan sosamente, sino los ocultaban.
       También AMLO se enzarzó con un absurdo y azaroso mensajito: "La ley es para las mujeres y para los hombres, no los hombres y las mujeres para la ley. La justicia está por encima de todo: si hay que optar por la ley y la justicia, no lo piensen mucho, decidan a favor de la justicia".
       AMLO se enzarza entre la ley, mujeres, hombres y justicia.
       La ley siempre es general, impersonal y abstracta; la aprueban seres humanos, para orientar sus conductas con hipótesis y consecuencias jurídicas.
       La justicia, como valor jurídico abstracto y orientador, debe concretarse necesariamente en la ley; pero jamás puede ser lo que diga el dedito de AMLO, exhortando no hacer caso a la Constitución, sino únicamente a su imprecisa justicia.

LOGOS
¿Y… nuestra pascua?
CUARTA TRANSFORMACIÓN DE BOLSILLO
       El término "pascua", en hebreo, griego o latín, significa paso, logro, salto, de acción tan positiva que nos excita a los seres humanos a estar festivos.
       En nuestro calendario 2019, el 22 de abril es lunes de pascua, y esta festividad contagia al resto de los días de esa semana.
       La raíz más profunda de esa pascua proviene de la religión hebrea, de su Antiguo Testamento, libro Éxodo, en donde se le llama "Institución de la Pascua" para celebrar la libertad de los hijos de Israel de su esclavitud en Egipto, la que duró "430 años"; migrando a tierra prometida "en número de unos 600 mil hombres de a pié, sin contar los niños", según ese maravilloso texto.
       Otra de sus raíces proviene del Nuevo Testamento, formado por cuatro evangelios, o biografías de Jesucristo añadidas a la Biblia hebrea por parte del imperio romano al instituir el cristianismo (en el primer Concilio de Nicea, año 325 de nuestra Era), oficializando el nacimiento y la muerte del hijo de dios, y su resurrección a tres días de fallecido, con los testimonios de María, María Magdalena, y de algunos apóstoles, según los autores de esos gratos y repetitivos textos: Mateo, Lucas, Marcos y Juan.
       Cada país inserto en la cultura occidental, al paso de los siglos, ha venido aportando a esas pascuas (en desarrollo de sus valores y necesidades) gustos y costumbres diversas.
       No hay duda que, con todo y los añadidos culturales postreros a sus orígenes, las pascuas siguen teniendo una naturaleza religiosa; sin embargo, con respeto para esas tradiciones, cada nación, sociedad e individuo, tienen sus propias pascuas.
       Así que cada quien sus pascuas; o sea, su paso, logro, conquista o su salto, de acción tan positiva que nos conmueva a una alegría divertida y donosa.
       Por ejemplo, en el fenómeno histórico de México, país que nace a su vida independiente, como tal, el 27 de septiembre del 1821, sus decisivos logros, sus conquistas importantes, sus destacados pasos, registrados en vivencias sociales y textos aceptados por mayoría y por gente profesional, se sintetizan en tres etapas: independencia, reforma, y revolución.
       Las tres han sido brutales, violentas y feroces en su inicio de destrucción y lucha por el mando. Una vez logrado el poder por los insurgentes, liberales y revolucionarios, respectivos a cada lapso histórico, se estabilizan institucionalizando sus ideales, y en cada caso nuestras pascuas se celebran.
       Ahora, desde julio 2018 y lo que va del 2019, con las ambiciones históricas del Presidente Andrés Manuel López Obrador, sin Plan de Desarrollo Nacional todavía, asevera AMLO que entramos a la cuarta etapa, y le denomina cuarta transformación, la que hasta el momento sólo ha sido de bolsillo, ocurrente e irrelevante, y todos los días en su conferencia, se elogia a sí mismo, haciendo su propia pascua, con miras de hacer pazguatos.
       Pero a la mayoría de los mexicanos no nos engaña nadie.

domingo, 7 de abril de 2019


LOGOS
Semana de reflexión
TORNAR EN POSITIVO, LO NEGATIVO DEL GOBIERNO
       En el mundo infantil de las adivinanzas se sigue indagando: ¿cuál es la vaca más atrayente?
       ¡La vacación!, siguen respondiendo los niños; esa suspensión temporal de trabajo o estudio que nos ofrece descanso, por motivos laborales, religiosos, o cívicos.
       A esta semana que transcurre le llaman santa, mayor, o de guardar, sin que lo santo corresponda a las cosas, siendo del mismo tamaño todas las semanas, y sin que nadie la guarde, ya que todos la gastamos de diversas maneras.
       Lo cierto es que estos días son de vacación, y lo deseable es hacer productivo nuestro descanso, al menos para reflexionar sosegada e inteligentemente respecto a nuestra realidad circundante.
       Aprendamos a reconvertir todo lo malo en cosas buenas; transformemos lo negativo en positivo. Que este propósito sea uso cotidiano.
       Por ejemplo, quien reciba dinero del erario federal, estatal, o municipal, o del presidente Andrés Manuel López Obrador, a través de sus autoritarias y electoreras órdenes, acéptelo de inmediato y no lo malgaste, aplíquelo en algo útil y productivo, pero honestamente vote en contra de los que le regalan dinero público, pues son simples delincuentes electorales.
       Reflexionemos, también, sobre las mentiras que dicen los políticos; y sin irritación de enojo, comprendamos la naturaleza y el alcance de esas falsedades, y obremos en consecuencia.
       El candidato presidencial AMLO prometió que, de ganar su elección, todas las fuerzas armadas regresarían a sus cuarteles de inmediato.
       Ahora, ya como presidente, AMLO ordena lo contrario a su promesa de campaña, y las fuerzas armadas se quedan en las calles, bajo el disfraz de guardia nacional.
       Aquel candidato, dados sus actuales mandatos, mintió, o se equivocó, pero frente a la población no ha dado explicaciones satisfactorias.
       Ya como presidente AMLO dio su palabra de que la guardia nacional tendría mando civil, y sancionó ese nuevo sistema jurídico.
       Mintió otra vez, o tornó a equivocarse, pero sin dar razón de su cambio, anunciando personalmente que el mando de esa guardia será un militar en activo, seguramente el general Víctor Hugo Aguirre Serna.
       Esos malos actos gubernativos transformémoslos en positivos, responsabilizando de todas sus consecuencias al presidente AMLO, y exigiendo que la guardia nacional actúe siempre sujeta a derecho, aplicando las consecuencias jurídicas con toda la coercitividad que conforme a la norma proceda en contra de los delincuentes, y protegiendo, primero, los derechos humanos garantidos de las víctimas y de los ofendidos.
       Aseguró que para los ex presidentes ningún privilegio. Ahora dispone AMLO, de manera ilegal, concederles 8 soldados a Felipe Calderón, y 8 a Vicente Fox, ¿para vigilarlos o auxiliarlos?
       AMLO debe saber que las autoridades exclusivamente pueden hacer lo que la ley les permite.
       Nuestra Carta Magna es superior al presidente.

lunes, 1 de abril de 2019


LOGOS
AMLO, Felipe VI y Trump
FRONTERA MALDITA; CARTAS PROVOCADORAS
       El Presidente Trump asevera que el gobierno de México no hace nada respecto a la crisis migratoria: "Muchas palabras sin acción… cerraré la maldita frontera con México, país que necesita leyes y actos fuertes contra migrantes".
       Ante esa denuncia y amenaza, el presidente López Obrador consultó a los asistentes a un mitin en Poza Rica, Veracruz, si debía o no responder a Trump por los reclamos que hace al gobierno mexicano: "¿quieren ustedes que yo le conteste?" 
       Y manipulando a los presentes hizo que, primero de voz, y después a mano alzada, respondieran con un rotundo "NO"; y satisfecho, AMLO grito: "Ese es mi pueblo".
       Horas después incitó a Trump, informalmente desde otro mitin: "¡que le entre!… pero a comprar el avión presidencial, pues yo no lo puedo usar porque soy honesto". Ese es nuestro presidente.
       El usual estilo rústico de consulta no fue utilizado por AMLO respecto a las cartas que envió: una al rey Felipe VI de España, y la otra al Papa Francisco, exhortándoles a que públicamente se disculpen por las injusticias y crímenes cometidos por ese país y esa iglesia hace 500 años en México. Pero a ellos no les pidió que nos compren el avión presidencial.
       Si también hubiese hecho esa consulta, en la misma forma sugerente, la respuesta de cualquier grupo de mexicanos hubiese sido "NO", y se hubiera ahorrado el tremendo ridículo nacional e internacional en el que incurrió, al tratar pésima y unilateralmente el asunto.
       Y aunque el reciente libro de Beatriz Gutiérrez Müller (La Memoria Artificial en la Historia Verdadera de la Conquista de la Nueva España de Bernal Díaz del Castillo) haya influido en esas guasonas epístolas de AMLO, él y sólo él es el único responsable, o el irresponsable, de esas misivas.
       Observemos.
       AMLO después de sufrir la rechifla y abucheo en el nuevo estadio de beisbol respondió divertida y taimadamente: "es la porra fifi".
       Similar fue su reacción al recibir las demoledoras críticas por sus provocadores y nimios despachos, pues con sonrisa traviesa y nerviosa intentó justificar su gansada: "Así los hago pensar en un tema histórico de importancia… y provoque memes buenísimos… volveré sobre el tema".
       Esa es una salida de cómico de la lengua, no de un presidente responsable. Pretende distraernos de lo importante, y a muy alto costo.
       Así, con tremenda "ineptitud e irresponsabilidad diplomática de gobierno", como bien lo calificó en su preciso editorial Beatriz Pagés, AMLO sigue con sus pifias diarias: "Hay que empujar al elefante (o sea al gobierno mexicano) para quitarle la reuma", cuando él personifica al gobierno, y la reuma no se quita a empujones.
       Duele y apena la forma en que trataron a nuestro presidente dos literatos distinguidos: Arturo Pérez-Reverte y Mario Vargas Llosa; cada uno en su estilo y en su momento lo visualizaron como turbulento (lento y turbo), perfil escogido por el propio AMLO.