miércoles, 25 de febrero de 2015

Pesados los escalones
POR FALTAS EN LA EDUCACIÓN
        Una reforma educativa más acorde con nuestras necesidades debe partir del reconocimiento de nuestra realidad, sea cual sea, aunque resulte doloroso analizarla, y afecte a quien le afecte tal examen.
        Y esa reforma educativa es necesario que tenga como propósito el construir una sociedad (un México) mejor que la que actualmente tenemos.
        Tengamos el valor de vernos educativamente al espejo para reconocer que somos así, pero que no nos gusta serlo, por varios motivos, a cual más de explicables, o justificables en su caso.
        Requerimos también al observarnos, crítica y propositivamente, decidir en forma clara y precisa cómo deseamos ser, dentro de nuestras posibilidades.
        Agregando al cómo, cuándo, con quién, dónde y para qué, vamos a aplicar nuestro mejor esfuerzo para vivir el proceso dialéctico que nos conduzca de lo que lamentablemente somos, a lo que aspiramos ser.
        Lo anterior, partiendo de lo concreto y cotidiano, a efecto de transformar la realidad para bien de la mayoría de los mexicanos.
        Sin posibilidades de cubrir el amplio espectro de nuestro problema educativo en este breve artículo que tiene que ajustarse a un espacio periodístico, limitado, daré sólo ejemplos con enfoques iniciales.
        Es necesario que participen todos los mexicanos que deseen auxiliar a nuestro proceso educativo tan maltrecho, aplicando, en inicio, las normas jurídicas vigentes, a reserva de reflexionar sobre las aceptables propuestas que se reciban para modificar o adicionar nuestro sistema legal en la materia.
        Los sectores con mayor presencia en el fenómeno de la enseñanza aprendizaje son los maestros, alumnos y padres de familia. Entendiendo por maestros a quienes si van a clase, a quienes se preparan todos los días para participar en la investigación y la enseñanza, quienes en su vida personal son ejemplos con su hacer, expresar, y pensar, bajo el denominador de la congruencia.
        Siempre la rectoría del fenómeno educativo será atribución del estado, representado por el gobierno, y éste por las autoridades competentes; empero, éstas deben conducirse al margen de la política electoral, y ser de reconocida capacidad académica, tanto por experiencia como por talento.
        Ese estado rector está obligado a que haya la infraestructura indispensable para el buen desarrollo del fenómeno enseñanza aprendizaje. Desde pintarrones y marcadores, hasta inmuebles decorosos. Desde los muebles indispensables hasta los talleres y laboratorios para las prácticas. Desde apoyos de lecturas, videos, radios, televisores, hasta la participación coordinada de todos los medios masivos de comunicación. Tanto en zonas urbanas como en las rurales, poniendo mayor empeño en las marginadas, por razones económicas, regionales, o étnicas.
        Lo anterior no se puede hacer de la noche a la mañana. Pero sí es posible iniciarlo, responsablemente, en serio, y de manera urgente.
        Revisemos, entre todos, los perfiles de ingreso, en todos los niveles, grados y modalidades, y los perfiles de egreso correspondientes.
        Actualicemos los mapas curriculares, las materias y sus temas, de todo el sistema educativo nacional.
        ¡Iniciemos la tarea! Más costoso es no hacerla.

lunes, 23 de febrero de 2015

Exceso de combustible
NO MÁS FUEGO A LA LUMBRADA
        Vicente Fox, ex presidente de México, tiene fama de ser ocurrente acuñando frases, aunque por lo general sus palabras resultan más dicharachos que conceptos.
        Recién aplicó al Presidente Enrique Peña Nieto, ante empresarios y con jerga ajedrecista, la filosa metáfora: "...está en jaque, y existe el peligro de que reciba el mate", en franca referencia a las circunstancias por las que atraviesa el país, aconsejando claramente al ejecutivo federal que "tiene que dar un giro de timón para retirarnos de esa trampa en la que estamos".
        Su actitud parece amistosa y de franco apoyo al Presidente de la República, talante en el que muchos mexicanos coincidimos, ya que lo que le pase a nuestro jefe de estado repercute en toda la población, por lo que el primer responsable de cuidar esa investidura es el propio Peña Nieto.
        Sin embargo, la forma en que lo ha dicho, el alcance de la chusca como la ha externado, y la manera como se publicitó, da pábulo a que la hoguera encendida se acreciente, y mejor no echar más leña a la lumbrada.
        Alejandro González Iñárritu, con su estatuilla hollywoodense del Óscar en la mano, lanzó su llamarada, rogando que en México encontremos "el gobierno que nos merecemos".
        Mientras, el Papa Francisco ecuménicamente nos lanzó su fogonazo: "...ojalá estemos a tiempo, en Argentina, de evitar la mexicanización... hablé con algunos obispos mexicanos, y la cosa es de terror..."
        Las formas de arrimar mayor combustible al fuego son múltiples, y traen remitente de diversos domicilios. Alguien autorizó la publicitación de todos los regalos que ha recibido el secretario de Gobernación Miguel Ángel Osorio Chong de diciembre del 2012 a septiembre del 2014, dando algunos nombres de los obsequiadores y describiendo genéricamente los regalos: "Elba Esther, jarra de vidrio con base... senadora Mónica Arriola, caja de frutos secos y café chiapaneco... Poire, caja de galletas de nuez... senadora Iris Vianey, queso de Cotija... Alejandro Encinas, libro... el presidente del PRD, cajeta de Celaya..." Y sigue una enorme lista.
        Al decir de la nota periodística, Gobernación "los ha remitido en tiempo y forma a la secretaría de la Función Pública".
        Se reconoce en primerísimo lugar tal conducta; empero, es necesario investigar el propósito de ese comportamiento propagandístico. No por el acto de ajustarse a la ley, pues esta determinación humana es irreprochable, sino por hacerla pública.
        Ojalá ese acto de autoridad promocional no sea del secretario, ya que no se ha concluido ni olvidado el tema de los supuestos o reales obsequios de costosos inmuebles a destacados personajes de nivel nacional, a quienes Beatriz Pagés aconseja con buen juicio: "entregar al pueblo esos inmuebles, convirtiéndolos en escuelas u hospitales..."
        El exceso del combustible hace peligrosa a la lumbrada, y ésta puede quemar al Presidente, y también a México. Por ello, debemos de pedir un alto al fuego, a quien lo provoca y a quienes lo lanzan.

miércoles, 18 de febrero de 2015

Anorexia y bulimia
ISRAEL HA PUESTO EJEMPLO
        Hace aproximadamente dos años que el Estado de Israel puso en vigencia una ley en donde se sanciona a todo el que cause y tienda a provocar la anorexia y la bulimia, desórdenes alimenticios peligrosos y de alto índice en adolescentes y jóvenes que, alteran su desarrollo nutritivo, para supuestamente lograr mejor imagen de su cuerpo.
        Aplica Israel, desde entonces, esa norma jurídica, prohibiendo y castigando, por ejemplo, a quienes promuevan como arquetipos en películas, videos, televisión, fotos, u otros medios similares, a  imágenes de modelos con baja masa corporal, so pretexto de una estética atractiva.
        Claro que la prohibición incluye al conjunto de medios de prensa de ese país, a los sitios electrónicos, cibernéticos, de planos inclinados, así como a la participación en pasarelas en eventos de modas.
        Dicha disposición preceptiva contiene a toda publicación de fotografías de modelos, hombres y mujeres, con índice de masa corporal (IMC) inferior a 18.5, según la cuantificación en medidas hebreas.
        Se trata de una medida para proteger a todos los habitantes de esa nación, pero sobre todo a los adolescentes y jóvenes de esos desórdenes alimentarios, en un país donde cada año mueren en promedio mil quinientas personas por anorexia o bulimia, dato aportado por el leído periódico Jerusalem Post.
        Es de reconocerse que es la primera ley en el mundo con esas características, pues tiene un contenido y forma eminentemente penales, ya que criminaliza ciertas conductas establecidas en los supuestos jurídicos del tipo delictivo, castigando con penas de privación de la libertad, sanciones económicas, inhabilitaciones, y enmendadores administrativos.
        Además, quienes infrinjan la norma podrán ser demandados civilmente, por quienes prueben su interés jurídico en el caso, ante una corte de justicia instituida por simples ciudadanos interesados, en donde son escuchados los familiares de pacientes de desórdenes alimentarios; y en donde, además, los modelos forman parte de los sujetos activos en el proceso.
        Es obvio que los principales responsables de violar la ley son, en primerísimo término, las compañías productoras de anuncios publicitarios o las empresas organizadoras de un evento de modas, siendo los medios de prensa sujetos de complicidad.
        La norma israelí, en comento, estipula que si la imagen de un modelo es alterada por cualquier tipo de programa de cómputo para simular un IMC inferior a 18.5, deberá de llevar una leyenda que lo indique, y cuyo tamaño cubra al menos el siete por ciento del total del anuncio.
        Una de las promotoras de esta ley es la reconocida ex parlamentaria Rachel Adatto, quien ha venido promoviendo, para otros países, estos preceptos que juzga "revolucionarios", y jactándose de que en estos dos años, de vigencia, las modelos anoréxicas "ya no podrán ser vistas por nuestros niños... y ya no habrá hombres que demanden novias muy delgadas."
        No es que los mexicanos tengamos que imitar a Israel, en estos o en otros preceptos, pero conozcamos su experiencia, en este problema que a todos incube.

lunes, 16 de febrero de 2015

¡Cuidemos a la Nación!
FRENEMOS LOS DESPROPÓSITOS
        El concepto moderno de "Nación" nos llega con el renacimiento jurídico político; lo incuba el pensamiento inglés, y prende en toda Europa.
        A la Nueva España adviene, tal término, con los jesuitas del siglo XVIII. Ésos que encabezados por Clavijero, Landívar, Alegre, Abad, son desterrados por Carlos III en 1767.
        La palabra "Nación" comenzó como todo bebé: débil, buscándose a sí misma, con la fragilidad inicial de todo lo que nace, sin saber caminar ni hablar; empero, muy pronto logró su infancia, su adolescencia y juventud.
        Hoy, en su tercera edad, parece encontrarse, tal expresión, con un pié en la tumba, y el otro pié sobre una cascara de plátano.
        Desde el siglo XIX, ése al que el escritor francés León Daudet (1867-1942) denominó "el siglo estúpido", el Manifiesto Comunista (1848) redactado por Carlos Marx y Federico Engels, llamó a la unión de todos los proletarios del mundo, para instaurar el internacionalismo obrero en el planeta, y con ello constituir una sola Nación.
        En el siglo XX, el desarrollo capitalista y su cabeza imperial en Estados Unidos de América, logra una globalización que constituye un preámbulo al internacionalismo burgués.
        Proletario o capitalista, cualquiera de ambos sistemas planteados en la vida real de los países, la tendencia es borrar las fronteras nacionales y a las naciones, para formar una unidad humana que pretende resolver los problemas de dicho nacionalismo real, pero que, a la vista está, que producirá nuevos conflictos, referidos a un internacionalismo balbuciente.
        Expresó lo anterior como un cuadro de referencia, ya que aparte de que México recibe como país el embate de las fuerzas internacionales, también tiene que soportar la acometida de las fuerzas internas que llevan, consciente o inconscientemente, el mismo despropósito: destruir a México.
        Y es que nuestra Nación se encuentra prisionera y enredada de un sin fin de disparates, tan absurdos en el fondo como al parecer justificados en la superficie. Son, sin dudar, la agudización de nuestras propias contradicciones.
        Pensemos qué le pasaría a nuestro organismo si se taparan nuestras arterias y nuestras venas, y no pudieran recibir todas las partes del cuerpo humano el fluido sanguíneo y la oxigenación requeridos. ¿Cuánto tiempo nos quedaría de vida?, o ¿cuántas lesiones nos provocaríamos?
        Así, ¿por qué permitir que a los gobernados se nos afecten derechos humanos garantidos por nuestra Carta Magna, referidos a nuestra libertad de tránsito?; ¿por qué aceptar que a nuestras ciudades y al país entero se le afecten las arterias y sus venas de la transportación, comercio, y economía?
        Lo anterior, efectuado por grupos que, aunque tuviesen derechos que hacer valer, los ejercen indebidamente y de manera ilegal, causando severas afectaciones delictivas a sectores mayoritarios de la población, sin que nadie aplique la coercitividad del derecho.
        Los males causados por todos los despropósitos actuales son efectos de un sistema que está por explotar. ¡Cuidemos a los mexicanos, y con ellos a la Nación: México!

miércoles, 11 de febrero de 2015

Pluribus Unum
PUEBLO Y SOLDADOS
        Un país con instituciones sólidas, honorables y útiles, constituye una gran nación; por ello, los destructores comienzan afectándolas.
        México ha gozado, en diversas épocas, de instituciones fuertes. En el siglo XX, a partir del Presidente Plutarco Elías Calles y su generación, se inició en nuestro país el México de las instituciones, aunque con desacierto Calles conservó sin límite de tiempo y condición, a su favor, el caudillismo, motivando, por su ánimo de perpetuidad, el quebranto con el cuarto Presidente de la República por él impuesto: Lázaro Cárdenas del Río.
        Hoy, todavía, somos herederos de las instituciones callistas, desarrolladas por los gobiernos subsiguientes, hasta que se llegó a las afectaciones que hoy padecen tales instituciones, sobre todo a partir de los sexenios de los presidentes Vicente Fox y Felipe Calderón.
        El General Salvador Cienfuegos, secretario de la Defensa Nacional, manifestó recientemente en la ceremonia conmemorativa del CII aniversario de la Marcha de la Lealtad: "Hay quienes quisieran distanciarnos del pueblo. ¡Imposible! Somos uno y lo mismo". Pluribus unum.
        Ésa es una forma de poner un límite a quienes pretenden perversamente afectar a una de las instituciones que debemos preservar: las fuerzas armadas de México, los soldados y los marinos de nuestro país, quienes con su conducta honorable, eficaz y patriótica, tienen por deber defender al pueblo, del que emanan y a quien sirven, llevando por jefe nato al Presidente de la República.
        Fuerzas armadas motivo de orgullo, con profunda raíz en nuestros mestizajes múltiples, con cimiento en la lealtad que mostró en todo su esplendor Mariano Matamoros y Guridi a José María Morelos y Pavón, quien personalizaba a la América Mexicana por ellos soñada.
        Matamoros fue descrito por sus contemporáneos como: "de pequeña estatura, delgado, rubio, de ojos azules, y su rostro conservaba las huellas de las viruelas"; valorándole como: "mi brazo derecho", "el más valiente de los insurgentes", "hombre íntegro, bizarro y estratega genial".
        Matamoros planteaba soluciones militares, y Morelos decidía; aquél ejecutaba las determinaciones de éste con toda disciplina y energía, aún en el caso que fueran en contra de las expuestas por él. Su lealtad fue reconocida por todos.
        Encabezó la caballería para romper las líneas enemigas en el Sitio de Cuautla; con profesionalismo venció a las tropas españolas en San Agustín del Palmar, respetando la mercancía que llevaban custodiada, y probando, así, "que los insurgentes somos soldados disciplinados y no hordas de bandidos como nos llama Calleja".
        Obsérvese que ni las fuerzas armadas de México ni su ejército tienen poco más de cien años. Tienen más de doscientos años, y fuertes raíces en la fragua histórica de nuestro pasado.
        Es momento, por necesidad y por convicción de todo mexicano, de iniciar la reconstrucción de nuestras instituciones nacionales. Sigamos, para ello, la mejor significación del pluribus unum, el concepto de que todos somos uno, y uno somos todos.
        Unidad de los mexicanos, sí, pero la que beneficie a la mayoría de los mexicanos.

martes, 10 de febrero de 2015

Nos pide perdón Clinton
ARMAS Y ENERVANTES=MÉXICO
        "Más claro ni el agua"; solían expresar los que suponían decir una verdad evidente. Como los que también manifestaban: "traigo los pelos en la mano", probando con ello que lo dicho era cierto.
        Vienen al caso, esas recordadas frases, por las disculpas que en actitud contrita presentara el ex presidente estadunidense Bill Clinton a México, en días recientes.
        Al participar Clinton en el encuentro "Juventud y productividad en México", organizado en una universidad privada cuyo campus se encuentra en Coyoacán, en el Distrito Federal, reconoció: "Ustedes tienen todo lo que se necesita, y yo desearía que no tuviesen narcotráfico, pero no es su responsabilidad. Nosotros bloqueamos el ingreso de drogas por aire y mar, pero no por tierra, generándoles problemas, por lo que yo me disculpo."
        Agregando: "La producción petrolera está cortada a un tercio por el curso natural de las cosas, promovido por la política nuestra... Pero yo aceleraría la transformación, lejos de una economía de petróleo."
        No lo dijo ni lo reconoció, pero en esa tesitura de confesiones sinceras bien hubiera podido aceptar, como verdadero, que la imposición para producir ciertos tipos de drogas nos vino del gobierno gringo por su urgencia de dar mayor valor a sus jóvenes durante las guerras en que participaron en el siglo XX: dos mundiales, la de Corea, Vietnam, Afganistán e Irak, entre otras.
        Y después de esos eventos bélicos, una vez que los batallones vuelven a su patria, los soldados quedan adictos a los enervantes que les fueron proporcionados. ¡Tal es su desgracia!
        Así han hecho de los Estados Unidos de América el gran mercado consumidor de drogas, vendiéndonos además su imagen como el "sueño americano" al que todo el mundo quiere concurrir e imitar.
        De esa forma el país eje de capitalismo, con todo su poderío, ha impuesto a México el papel de abastecedor, o la correa de transmisión, de las drogas que ellos consumen.
        Pero junto a lo anterior, EU implanta muchos de los males que actualmente nos aquejan. Tenemos que soportar, a la vez, sus criminales travesuras de introducción de armas y municiones de calibres descomunales, tanto para que los mexicanos nos matemos entre sí, como para obtener para ellos los ingresos propios de una economía bélica.
        De paso, debilitan a las instituciones públicas, auxilian en el manipuleo de nuestras elecciones, y amplían su radio de acción soberana sobre nuestro territorio y nuestra población, reduciendo al mínimo nuestra independencia.
        En la "opera prima 600 millas", del cineasta mexicano Gabriel Ripstein, se denuncia esta historia trágica de las armas con las que el gobierno estadunidense y sus industriales de la guerra han promovido el desangre de las poblaciones de nuestro país.
        Otra de las políticas impuestas a México por los EU es el exportarnos las empresas basura que ellos han creado y tolerado en sus colonias, como la coreana que operaba en Guadalajara.
        También por ello el ex presidente Clinton debía haber pedido perdón.

lunes, 9 de febrero de 2015

¿Secretario sin Secretaría?
UNA FUNCIÓN PÚBLICA SIN CUATISMO

En  memoria   de   Mario  Vázquez  Raña,
señor del deporte, señor del periodismo.

        Recientemente el Presidente Enrique Peña Nieto generó dos actos de autoridad: primero, designó como secretario de la Función Pública a Virgilio Andrade Martínez; y, segundo, le encargó pública y específicamente investigar "si hubo o no conflicto de intereses" en las adquisiciones que de conocidos inmuebles hicieran, por separado, él mismo, su esposa Angélica Rivera, y el secretario de Hacienda y Crédito Público Luis Videgaray.
        Para ambas determinaciones presidenciales la mayoría de los comentarios, por diversas razones o sinrazones, son en contra del Presidente Peña Nieto.
        Siendo eso un hecho francamente notorio, no repetiré ni las formas, algunas lamentablemente soeces, ni las elucidaciones que se han pronunciado en torno a esos actos de autoridad.
        Partiré, para analizar esos dos mandatos del ejecutivo federal, de una simple suposición. Imaginémonos que en lugar de haber nombrado al señor Andrade Martínez como secretario de la Función hubiese dado el cargo a Andrés Manuel López Obrador y que, desde luego, éste hubiese aceptado.
        Dentro de ese escenario imaginado, ¿cómo hubiese respondido la opinión pública?
        ¡Qué sorpresa hubiésemos llevado!; empero, también, con el nombramiento de Virgilio y la encomienda ordenada nos llevamos un gran asombro. Sin duda, ¡hay de sorpresas a sorpresas!
        La sorpresa con Virgilio Andrade es que en la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal parece ya no existir la Secretaría de la Función Pública; incluso, en las plataformas electrónico cibernéticas de las dos cámaras de Congreso de la Unión y de Gobernación, que dan cuenta del texto íntegro de dicha ley orgánica, hasta el 8 de febrero del 2015 no aparece esa secretaría. Sólo se observan 16, más la Consejería Jurídica.
        Se inicia con Gobernación, y se concluye con Turismo. En ese artículo 26 de tal ley, no se encuentra la Secretaría de la Función Pública. Esperemos que sólo sea un problema de actualización informativa, y no el caso de un secretario sin Secretaría, porque las secretarías del Ejecutivo Federal sólo pueden instituirse por ley.
        Otra sorpresa con la designación de Andrade es que, siendo conocida su relación amistosa con los supuestos implicados en conflicto de intereses, a la par de su nombramiento se le haya impuesto la comisión especial por una de las partes conflictuadas.
        Es obvio, y de explorado derecho, que nadie puede ser juez y parte al mismo tiempo, ni directa ni indirectamente.
        Tomo algo del artículo de la semana pasada del escritor José Fonseca; la frase final referida al Presidente: "sus críticos dirían: Lo ven, Peña Nieto no sabe nadar".
        Justa es esa expresión, ya que quien no sabe nadar, y se encuentra en aguas profundas, por más que se abrace a su propio cuerpo no podrá salvarse.
        Pero también hubiese sorprendido el nombramiento a López Obrador como secretario de la Función Pública, y mayor pasmo hubiese sido si aceptase, siendo un crítico a perpetuidad que parece vivir para ser oposición eternamente, a pesar de las cualidades que deben reconocérsele.

miércoles, 4 de febrero de 2015

Frente a la miseria
COSTOSO PROCESO ELECTORAL
        En todas las entidades federativas del país, y en todos los niveles económicos de la sociedad mexicana, se llega a la conclusión de que nuestros procesos electorales son demasiado caros.
        Gente de todas las ideologías piensan lo mismo: Un México sin empleos, sin cobertura plena de educación, de salud, de vivienda, con una deuda pública enorme, con quebranto en sus finanzas, no puede ni debe financiar procesos electorales multimillonarios.
        Antes de recortar en proyectos productivos como la transportación ferrocarrilera, la que incluso puede servir de detonante para dar una nuevo sentido a la política del transporte colectivo de nuestra nación, debe recortarse el enorme gasto en procesos electorales.
        A la fundada crítica por esa descomunal asignación a gastos electorales en los Presupuesto de Egresos del 2015, en la Federación, en las 32 entidades federativas, y en los 2445 municipios, de los Estados Unidos Mexicanos, ahora se suma la opinión de la Arquidiócesis de México.
        En su semanario Desde la fe, dedica todo un editorial a este asunto terreno, afirmando que es escandaloso el financiamiento y la descomunal asignación de recursos otorgados a los partidos políticos para este proceso electoral 2015
        En esta crítica hacen un comparativo entre lo que se va a gastar en salud y asistencia social con lo que se proyecta para erogar en elecciones. Y el monto electoral es superior a los otros dos ramos.
        Al editorial lo titulan "Derroche del pueblo a costa del pueblo", lo que no corresponde totalmente a la realidad, ya que ese derroche no lo realiza el pueblo, sino el gobierno representado por autoridades, para el caso, la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, órgano encargado de la aprobación de dicho Presupuesto de Egresos de la Federación.
        Lo que sí es cierto, es que ese despilfarro se perpetra a costa del pueblo; y, bien pudieran hacerse, en lo electoral, varios recortes que serían aplaudidos por la mayoría de la población. Si hubiera la voluntad para ello, bien se podría efectuar todo el proceso electoral sin tanto gastadero. En varios días de trabajo se elaborarían proyectos viables y serios para, con poca erogación, celebrar el próximo proceso electivo, con mayor calidad y certidumbre.
        En este año 2015 se elegirán, el 7 de junio, 500 diputados federales, nueve gobernadores, 993 ayuntamientos, 641 diputados locales, y 16 delegaciones políticas del Distrito Federal. Los costos de estos eventos pueden reducirse al mínimo indispensable, ya que esas elecciones tienen que hacerse.
        Si no se hace ese recorte a lo electoral, ahora y en serio, al final de ese proceso tendremos suficiente material para observar, con mayor claridad, nuestros deslices y torpezas.
        Y ese proceso no se termina un día después de la emisión de los votos, sino que prosigue varios meses después, con varias etapas que, en no pocos casos, alterarán la voluntad popular emitida.
        Todo a nombre de una "democracia", que no lo es.

lunes, 2 de febrero de 2015

La fuerza de los resentidos
DEL ANARQUISMO A LA DICTADURA
        No es necesario ser ducho para conocer las más turbias y turbulentas manifestaciones de las almas resentidas, más cuando éstas empiezan a ser manipuladas por anarquistas que responden a intereses encubiertos y nada confiables.
        Los resentimientos crecen, en toda la población de nuestro país, por los torpes manejos de quienes ejercen el poder en la política, la religión, la economía, la educación, y en el resto de los fenómenos sociales.
        Pero por igual, los señores del poder se irritan al recibir los odios del pueblo; y así, todos nos enfurecemos en esa retroalimentación de animadversiones mutuas, hasta tornar nuestros  vínculos sociales enfermizos en un polvorín listo para la explosión, o en un encabronamiento de ese México bronco.
        A la insistencia del Presidente Enrique Peña Nieto al invitarnos a que no nos entrampemos en el doloroso asunto de Ayotzinapa y que es necesario superar ese caso, se le responde agudizando más el problema, y generando mayores conflictos a nivel presidencial, en todos los asuntos gubernativos.
        Ahora los padres de los 43 alumnos de esa normal de Guerrero, que no estuvieron al cuidado de que sus hijos no corrieran riesgos en ese internado y estudiaran para ser mejores en todos los sentidos, viajan al extranjero para visitar organismos internacionales y presionar más al gobierno mexicano.
        Gobierno mexicano que, por otra parte, dio lugar a la desaparición forzada, o al cruel asesinato, de esos jóvenes que por más provocadores que hubiesen sido no merecían nunca lo que oficialmente la PGR dice que les pasó.
        Y es que cada grave problema del país parece ser producto de una suma de actos irresponsables de todos o casi todos los figurantes, lo que nos coloca constantemente como pueblo en el filo de la navaja.
        El sector hacendario, por dar otro ejemplo, hace todavía algunas semanas nos dio a conocer a través del secretario Luis Videgaray Caso que era innecesario hacer recortes presupuestales, porque México contaba con coberturas financieras de seguros contratados en el año 2014 que nos garantizaban los ingresos petroleros para este 2015. A través de todos los medios de comunicación se dijo esto, subrayando la previsión eficaz de la reingeniería nacional en esa materia. ¡Todos lo escuchamos!
        Pero ahora, unos días después, el mismo secretario Videgaray nos anuncia la necesidad de recortar el gasto público por un monto de 124 mil millones de pesos, dándole el calificativo a este recorte de "preventivo", y presentando como su causa "un cambio en el entorno financiero internacional". y aceptando, además, que el Banco Mundial nos reordene.
        Ese enorme boquete financiero está generando más resentidos, y la mentira o la ineptitud de esa alta burocracia hacendaria aumenta ese inquina, en extensión y en intensión, al tiempo que debilita más a los gobernantes.
        Y esa anemia gubernativa hace más agresivos a los opositores en su contra; conduciéndonos a la anarquía, la que sólo anuncia la llegada de una dictadura.