lunes, 13 de julio de 2015

Día del Abogado
EL ALMA DE LA TOGA
        El 12 de julio se conmemoró el Día del Abogado en México y, con ese motivo, se llevaron a cabo diversas ceremonias en nuestro país.
        Como profesión liberal adviene con el renacimiento, cuando este movimiento histórico incide en el sistema normativo para separar, discriminar y distinguir, todos los preceptos que, entremezclados totalmente, formaban una familia de reglas religiosas, técnicas, urbanísticas, éticas, jurídicas, de trato social, para encauzar conductas humanas en todos los órdenes de su vida.
        El renacimiento, a su tiempo, crea lo que hoy son las profesiones, entre ellas la licenciatura en derecho. Actividades que requieren una preparación académica, un título, y un registro público, las que, toda proporción guardada, suplen a los títulos de nobleza que constituían la forma de organización en la Edad Media de la cultura occidental, es decir, en el feudalismo.
        La clase social que tomó el poder en el renacimiento fue la burguesía, ocupando el sitio de la clase aristócrata, con el ánimo de mejorar la forma de organización social. En aquellos tiempos un feudalismo caduco fue vencido por un capitalismo revolucionario.
        La etapa del renacimiento aún no concluye, por lo que el capitalismo y la burguesía siguen dando su potencial como sistema imperante que, cada año que pasa, produce sus contradicciones, agudizándolas cada vez más.
        Así que todos los profesionistas, entre ellos los licenciados en derecho, cumplen una función social como parte de esta clase dominante y, por ello, responsable.
        Obvio, no es lo mismo licenciado en derecho que abogado. La licenciatura en esta materia sólo es un título académico, del que se puede pasar a un postgrado, una maestría, o a un doctorado, conforme a normas jurídicas que regulan estos grados escolares.
        Empero, ser abogado es otra cosa; es saber, y seguir aprendiendo constantemente, las teorías y las técnicas jurídicas para litigar, participando en el fenómeno real de aplicación del derecho al caso concreto con interés controvertido, abogando por alguna de las partes.
        Ese dominio cultural y científico del derecho debe ser su herramienta para aportar a sus clientes, por quienes aboga, su experiencia, destreza, pasión, cautela, abnegación, pero sobre todo su humanismo.
        Ciencia sin conciencia arruina las almas; ciencia con conciencia las libera.
        El Día del Abogado fueron reconocidos, en una ceremonia nacional acompañada por un Congreso Internacional de juristas, cuatro michoacanos que ejercen positivamente la profesión homenajeada: Damián Arévalo Orozco, director de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la Universidad Michoacana; Héctor Octavio Morales Juárez, quien se ha desempeñado como magnífico juez y magistrado; José Arturo Pérez García, laboralista reconocido; y, Guadalupe Grissel Aguilar Sosa, quien habiendo sido destacada alumna viene realizando un buen trabajo profesional.
        ¡Felicidades para ellos!
        Ángel Ossorio y Gallardo, (1873-1946) abogado español a quien se le llamó "el Papa de la juridicidad" por sus virtudes en el ejercicio del derecho, escribió El alma de la toga. Hoy le recuerdo, y le presento como arquetipo del abogado.