miércoles, 9 de noviembre de 2011

Todos a Votar EN LEGÍTIMA DEFENSA

           Marko Cortés sabe que está violando la Constitución de Michoacán, ya que ni nació en el Municipio de Morelia, ni ha adquirido la vecindad legal requerida de al menos dos años antes al día de la elección.
            La vecindad en un municipio no se adquiere sólo por tener una propiedad inmueble en el lugar, sino que es necesaria la presencia personal del individuo, en el sitio, al integrarse a la vida comunitaria.
            Esa actitud chapucera del candidato panista generará que no se vote por él ni por su partido, más cuando del inmueble que compró en Morelia ni siquiera ha pagado el Impuesto Predial, según notas periodísticas que lo exhiben como un incumplido de sus obligaciones como mexicano, como lo dispone la fracción IV del artículo 31 de nuestra Carta Magna.
            Podríamos, acaso, perdonarle a Marko que nos falte al respeto a los morelianos por su mendaz participación en esta campaña electoral para elegir al Presidente Municipal de Morelia; empero, lo que no debemos perdonarle es que se falte al respeto a sí mismo.
            Él contendía para la gubernatura de Michoacán, y esta aspiración era legítima, hasta donde llega mi información al respecto. De haber logrado esa candidatura del PAN, al Solio de Ocampo, les hubiera ahorrado tanto al Presidente Felipe Calderón Hinojosa como a su hermana Luisa María, la pena de perder, pues aún en el caso de un remotísimo triunfo, éste se convertirá, por razones dialécticas, en un rotundo fracaso, afectando a Michoacán en forma grave.
            Qué vergüenza que alguien que participaba para ocupar el máximo cargo en las ligas mayores del Estado, se haya conformado sumisamente para ir como candidato a la liga municipal. Para esto se requiere falta de carácter, una ambición capaz de todo, y no tener sensatez alguna para faltarse al respeto a sí mismo.
            Por otra parte, la mercadotecnia y el erario federal le han sobrado en su campaña; lo que no pasa desapercibido para el elector, quien no votará por Marko.
            Y el PRD nulificó sus posibilidades para el Municipio de Morelia, al designar de dedazo a una persona demasiado conocida, en la que todos desconfiamos, de nombre Genovevo, siendo los perredistas los que más sospechan de él.
            Por fortuna el PRI acertó al elegir como candidato a la Presidencia Municipal de Morelia al Maestro Wilfrido Lázaro Medina, quien sin los grandes recursos económicos del millonario Figueroa Zamudio fortalecido, además, por el erario estatal, y quien sin los millones recibidos por Marko del presupuesto federal, hizo una campaña eficaz.
            Todo esto se reflejará en las votaciones del próximo domingo 13 de noviembre, a las que debemos concurrir todos los ciudadanos de Morelia, y de Michoacán, votando en legítima defensa.
            Saquemos al PRD del gobierno de Michoacán; y no permitamos que el gobierno descalificado del Presidente Felipe Calderón Hinojosa traslade, al estado, su sangrienta e ineficiente forma de hacer política.