lunes, 24 de octubre de 2011

Su Máxima Virtud ES SU MAYOR DEBILIDAD

En el debate, o fuera del debate, en la ciudad o en el campo, en Michoacán o fuera de él, la más segura es Luisa María Calderón Hinojosa, candidata del PAN a la gubernatura de nuestra entidad federativa.
Segura por las protecciones y recursos a su alcance, y esto la conduce a tener desplantes de seguridad en su decir y en su hacer, aunque su expresión y su conducta sean equívocas. Y esto genera, desde ahora, peligros para Michoacán, y para ella misma, pues su máxima virtud es su mayor debilidad.
¿Cuánto le durará la protección del Estado Mayor Presidencial a su derredor?, ¿por cuánto tiempo podrá disponer de recursos federales?, ¿hasta cuándo tendrá acceso a la información privilegiada que tiene la Presidencia de la República?, ¿en qué momento desaparecerá de su patrimonio personal ese elemento ajeno y objetivo que le sirve de sustento a sus desplantes seguros?
El sexenio de su hermano, el Presidente Felipe Calderón Hinojosa, concluye el último día de noviembre del año 2012; y sea quien sea la persona que lo sustituya como titular del Ejecutivo Federal, el encanto del poder para esa familia y ese grupo llegará a su fin.
Cada 6 años se repite, con algunas diferencias, el ritual emblemático de "el Rey ha muerto; viva el Rey". Este decir tiene un sonido francés, pero no dista mucho de lo que en México se manifiesta al respecto: No hay mal que dure seis años, ni pueblo que lo resista.
Pero expresiones populares aparte, la visión inicial que los michoacanos en su mayoría tuvimos cuando nos enteramos de que el Presidente Felipe y su única hermana Luisa María habían decidido que ésta fuera gobernador de Michoacán, fue de rechazo contundente.
No es posible que con tan mal gobierno federal se imponga el nepotismo, se oía por dondequiera. El Estado Mayor Presidencial al rededor de la hermana le espantará a los electores. Nunca ha hecho una campaña electoral propia, se decía, siempre ha sido de las plurinominales.
Jamás ha tenido cargo de responsabilidad en la administración, manifestaban no pocos. Es inaudito que se embarquen el Presidente Calderón y su hermana en una campaña en la que irremediablemente perderán. Si ganará Luisa María pésimo para los dos; y si pierde, peor para el par.
Ahora, los guardias presidenciales están en acción a favor de la Cocoa, también el presupuesto federal trabaja arduamente en la tarea, y los funcionarios públicos del Ejecutivo Federal, tan malos para administrar, han venido a hacer una grilla estruendosa.
Con recursos federales se están pagando estrategas extranjeros para el proyecto Cocoa Michoacán, convirtiéndolo en el más dispendioso de todo el sexenio calderonista.
Por tanto gasto electoral inútil, por la pésima política que representa, y por tanta seguridad artificiosa, tendrá al final el rechazo popular; éste, observo, es el sentir de los michoacanos.
Más de cincuenta mil muertos pesan en la conciencias.