250
millones, 375 millones, 670 millones, 840 millones, 1,500 millones. Y sus
nerviosas declaraciones se convirtieron en una danza de millones, sin ton ni
son, confundiéndonos a todos.
Es
obvio que ante las protestas públicas del gobernador de Michoacán, respecto a
que le estaban reteniendo por motivos electorales partidas ya presupuestadas
por el gobierno federal, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público tenía que
responderle, y lo hizo. Claro que quien está detrás de Hacienda es el
Presidente Felipe Calderón Hinojosa.
Así
que en el fondo de este nuevo conflicto se encuentran los mismos rijosos:
Felipe y Leonel; y quien pierde es el pueblo de Michoacán.
La
materia superficial de este embrollo es si los recursos federales le han
llegado a tiempo, y completos, al Estado.
Y
se ha comprobado que sí le han llegado a tiempo esos dineros. En esto las
partes peleoneras están de acuerdo; empero, el gobierno del estado señala que
han llegado, pero incompletas, ya que le faltan "más de 441 millones de pesos".
Mientras
la federación asegura que lo no entregado al gobierno godoyistas directamente
asciende a lo sumo a "366 millones de pesos, en virtud de que el gobierno de
Michoacán no ha mostrado algunos documentos, por una parte, y por otra a que se
han retenido partidas para pagar directamente a los acreedores de la
administración michoacana".
A eso, la secretaria de Finanzas y Administración de Michoacán
sólo le recuerda a Hacienda "la intervención de los coordinadores
parlamentarios del PRD, Carlos Navarrete Ruiz y Armando Ríos Piter el pasado
martes 11 de octubre se realizó nuevamente una reunión encabezada por el
gobernador Godoy y usted en donde de manera formal se volvieron a plantear la
problemática respecto al rezago de las participaciones federales", como si
el padrinazgo de estos dos políticos perredistas pudiera resolver la fallas del
gobierno estatal.
Este sainete se da entre una pésima administración estatal, y un Ejecutivo
Federal urgido de ayudar a su hermana a ser gobernador del Estado.
Al margen de lo anterior, los números son números, y las cuentas
nada tienen que ver con los cuentos. En las finanzas se requiere mucha
seriedad, honestidad, y eficacia.
Nada de jugar a las eleccioncitas comprando con recursos
del erario los votos de sus candidatos perredistas. Nada de imponer a la
hermana como gobernador, a fuerza de medidas ilegales.
Felipe y Leonel nos faltan al respeto a los
michoacanos.
Ese cuento de que los funcionarios públicos no
cobrarán, nada tiene que ver con las cuentas claras, y a la sociedad esos
cuentitos le causan risa. Igual causa hilaridad el nepotismo del Presidente
Calderón.