miércoles, 16 de febrero de 2011

UNA PRESA SIN AGUA

Algo Excepcional
UNA PRESA SIN AGUA                                                                         
            El director local de la Comisión Nacional del Agua en Michoacán, Pedro Aguilar, dio recientemente una entrevista de prensa, de la que da cuenta nuestra compañera periodista Silvia Hernández González, en nota destacada en El Sol de Morelia del día 16 de febrero de este año 2011.
            Afirma el representante de CONAGUA en nuestra entidad federativa algo lógico, jurídicamente hablando: “La presa Francisco J. Múgica pasará a manos de la federación”.
            Y lo anterior se observa obvio, ya que conforme a los artículos 27 y 73 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, todo lo referente al agua y a las presas se vincula con atribuciones federales.
            En el artículo 27 Constitucional encontramos: “Son propiedad de la Nación las aguas… de los ríos y sus afluentes directos e indirectos, desde el punto del cauce en que se inicien las primeras aguas permanentes, intermitentes o torrenciales, hasta su desembocadura en el mar… el dominio de la Nación es inalienable e imprescriptible y la explotación, el uso o aprovechamiento de los recursos de que se trata… no podrá realizarse sino mediante concesiones otorgadas por el Ejecutivo Federal…
            Mientras el 73 de nuestra Carta Magna ordena: “El Congreso de la Unión tiene facultad: … XIII.- Para dictar leyes según las cuales deben declararse buenas o malas las presas de mar y tierra, y para expedir leyes relativas…
            No hay duda, por ende, que una presa sin agua no tiene ningún sentido, y algo así resultaría un absurdo; pero más doloroso sería, y hasta criminal,  que miles de millones de pesos, que se supone costó dicha presa según información oficial, hubieran sido gastados sin ton ni son.
            Porque el representante de CONAGUA asevera que dicha presa debe ser administrada por la dependencia federal, “siempre y cuando cubra con los requisitos para ser recibida… y uno de los impedimentos para que esto no ocurra es que la nueva infraestructura hidroagrícola no sea operativa”, ya que el organismo que él representa “no hizo una revisión estructural o constructiva de la obra”.
            Agregando el declarante que la Comisión del Agua: “no puede devolverle al gobierno del Estado el dinero invertido en la construcción de la presa”, y que “un impedimento técnico para que la obra no sea aceptada por el gobierno federal es que se constate la inoperatividad de la obra”.
            De todo todas esas afirmaciones negativas del funcionario debe entenderse que el gobierno del estado construyó una presa sin consentimiento ni conocimiento ni concesión del gobierno federal, independientemente de que no es una obra que se encuentre dentro de las atribuciones legales de un gobernador, ya que las presas y el agua de ellas corresponde a las facultades federales.
            También las palabras del representante de CONAGUA reflejan la descoordinación entre el ejecutivo federal y el gobernador, conduciéndonos a la aberrante y costosa obra pública consistente en una presa sin agua.
            Mañana, con esa desorientación        monstruosa los gobiernos de las entidades federativas se van a poner a construir líneas para el ferrocarril, sin ferrocarriles; pozos petroleros sin petróleo; y, casa de fabricación de monedas y billetes, sin billetes y sin monedas.
            ¡Qué cosas tan excepcionales estamos viviendo!