miércoles, 11 de abril de 2012

Independencia, Reforma, y Revolución LO MEJOR DE LO NUESTRO


            El 11 de abril próximo pasado se conmemoró, en Pátzcuaro, el CCXLVII Aniversario del Natalicio de Gertrudis Bocanegra del Lazo y de la Vega, insigne heroína que ofrendó su vida por la Independencia de México.
            Claro que hablamos de la etapa de la iniciación de la lucha por la Independencia de lo que hoy es nuestro país. Me refiero a los integrantes del grupo encabezado por Miguel Hidalgo, quienes proclamaron, en su momento y a su modo, la independencia de la Nueva España de la Corona Española.
            Y algo tan valioso como esa propia independencia, decretaron la abolición de la esclavitud, la supresión de castas, y la reintegración de terrenos a las comunidades indígenas, víctimas de la injusticia voraz de la soldadesca europea, y de la ambición clerical dominante en los tres siglos de coloniaje.
            La espada y la cruz se asemejan y se hermanan y, ambas, fueron instrumentos de dominación innegables. Los indígenas llegaron a tenerles un terror que ha dejado huella en sus sucesores.
            De esa casta inicial de insurgencia fue doña Gertrudis. Y su recuerdo y ejemplo perdurarán por siempre. Esas faldas de mujer sí valen. No fueron falsas ni electoreras. Por la libertad, la independencia, la igualdad, y la justicia, bien vale ofrendar la propia vida.
            Total, esa etapa de la iniciación independentista es algo de lo mejor de lo nuestro, y jamás debe caer en el olvido. Bien por el municipio de Pátzcuaro y su alcaldesa Salma Karrum Cervantes, quien junto con el síndico Jorge Pita Arroyo, vienen realizando un buen trabajo edilicio.
            La joven diputada Daniela de los Santos Torres tuvo a su cargo el discurso oficial, y su palabra conceptuosa estuvo a la altura de los acontecimientos por los que fue convocado esa ceremonia.
            Debo añadir, además, que la espina dorsal de la vida de México está constituida por esa Independencia, por la Reforma encabezada por Benito Juárez, y por la Revolución, en donde destacó como caudillo Emiliano Zapata, y quien sigue siendo el arquetipo y abanderado de toda lucha agraria.
            Por ello el pasado 10 de abril, en Cuatro Caminos, ante el gobernador Fausto Vallejo Figueroa, muchas voces dejaron sentir su protesta para que se propicie el desarrollo del agro mexicano, y se pueda obtener la independencia alimentaria del país.
            Pero junto con ello, el real mejoramiento de calidad de vida del campesino mexicano, quien sigue levantando las mejores cosechas del mundo, pero el California, Texas, Nuevo México, y el resto de los Estados Unidos de América.
            Es tiempo, propuso el gobernador, de que se configure un proyecto en conjunto para el rescate del sector agrícola, en donde la presencia y decisión de los campesinos sea eficaz.
            La memoria de Zapata lo merece, pero sobre todo, lo merecen los campesinos de México. Esto, también, es lo mejor de lo nuestro.