LOGOS
Concurso
de pudrición
PREMIO
MAYOR PARA AMLO
La megalomanía irreflexiva del
presidente Andrés Manuel López Obrador lo lleva a hablar de la soga en casa del
ahorcado.
El nivel educativo presidencial es
refranero, por esto, lanzó la siguiente aseveración desde su plataforma
nacional de la maña-nera: “El Poder Judicial Federal está podrido, por lo que
necesitamos que jueces, magistrados y ministros, sean electos directamente por
la ciudadanía que elige al presidente, a los senadores y a los diputados al
congreso de la unión”.
Pero (con su decir) no probó el
presidente López ¿por qué está podrido ese PJF?; sus únicas referencias al
respecto fueron tres: Una, “Los ministros ganan más que el presidente”. Dos,
“Los juzgadores están al servicio de los conservadores y neoliberales, que son
mis enemigos”. Tres, “Sentencian esos organismos jurisdiccionales en contra de
mis actos de autoridad, o de los actos de autoridad que me convienen, o que
convienen al pueblo pobre y honesto”.
Obvio, el Poder Judicial Federal no es
el castillo de la pureza, pero tiene mecanismo interiores y eficaces que lo han
venido mejorando; empero, el Poder Ejecutivo Federal y el Poder Legislativo
Federal, carecen de esos mecanismos interiores eficientes. Y la pudrición de
estos dos poderes está, hoy por hoy, a la vista de todos.
¡Vamos!, el que está más podrido es el
Poder Ejecutivo Federal, o sea, el presidente O; este López está en
descomposición total.
Andrés Manuel exhibe su salario mensual:
160 mil pesos al mes, pero no dice nada de su remuneración. La remuneración es
el salario más todas las demás prestaciones que se obtienen en el cargo.
En cambio, López O pone a la vista la remuneración
de la ministra presidente que más gana: 600 mil pesos mensuales. Ésta es la
mayor remuneración en el PJF al mes.
Y la remuneración del presidente de la
república, López O, al mes, sólo él la sabe exactamente; empero, resulta lógico
que su remuneración mensual supera los 15 millones de pesos.
Es decir, tres veces más de lo que se
les daba, mensualmente, a los ex presidentes de México.
Amlo como presidente gana, en un mes,
más de lo doble de los 11 ministros juntos, de la SCJN.
Por otra parte, el presidente López está
más al servicio de los conservadores y neoliberales, que los juzgadores
federales; es más, el presidente O es más conservador y neoliberal que todos
los miembros del PJF.
Miente tanto Andrés, que se inventó a
sus propios enemigos, cuando su verdadero enemigo es él mismo.
Se propuso López O engañar a todos en
todo.
Los jueces, los magistrados y los
ministros, del PJF no sentencian en contra del PEF ni del PLF, sentencian
contra leyes y/o actos de autoridad de estos últimos dos poderes federales, al
considerar que ellos transgreden derechos humanos garantidos y/o vulneran el
texto de la Constitución de los Estados Unidos Mexicanos.
En
su maña-nera, el presidente O confunde al “pueblo” con las “personas”; éstas
son las únicas que pueden tener interés legítimo en el juicio de amparo, en las
controversias constitucionales, en las acciones de inconstitucionalidad,
controversias de competencia, y en todos sus recursos
De
mediados del 2018 a lo que llevamos del 2023 (en el ejercicio presidencial de
Amlo) ha aumentado en 10 millones el número de pobres en México; y protervamente
López quiere mucho a los pobres, para que voten por los que él ordene, a cambio
de corromperlos con limosnas de consumo.
Pobres
y ricos tienen que sujetarse al sistema legal mexicano, y en diversas materias
al pobre se le otorga, por ley, mayores protecciones. Sin embargo, este tema
debe perfeccionarse a favor de los humildes, para que dejen de serlo.
Empero,
todos los problemas jurídicos que padecemos, en nuestro país, no se solucionan
eligiendo directamente a jueces, magistrados y ministros, por voto de la
ciudadanía, como se elige al presidente, a los senadores y a los diputados al
congreso de la unión.
La
naturaleza jurisdiccional no puede estar sujeta, al menos por ahora, a esta
demagogia peligrosísima.
Por
mientras y en primerísimo lugar, la pudrición del presidente López O exige el
voto de todos los ciudadanos, para con un sufragio de “NO”, aplicarle una
cirugía mayor.