LOGOS
A
la cárcel los corruptos
Y…
¿QUIÉN CERRARÁ LA REJA?
El método del
sheinbaum-obradorato, para engañar a millones de personas, consiste en
regalarles bimensualmente su propio dinero: 6 mil 200 pesos.
Y tácita y automáticamente se
les encarrila al pordioserismo, y a la absoluta sumisión.
Aplicando ese procedimiento se
les puede mentir, y esa masa amorfa llamada “pueblo” tendrá por verdad la más
increíble y grotesca de las mentiras.
En una de las más recientes
falsedades la presidente formal de México aseguró: “No vamos a subir impuestos
ni habrá nuevas cargas fiscales para el 2026.”
¿Y qué creen Ustedes,
estimados lectores?
Acertaron.
La dupla sheinbaum-lópez
(dueña de los tres poderes: ejecutivo, legislativo y judicial, en su iniciativa
de Ley de Ingresos y su Miscelánea Fiscal-2026) sustraerá de los bolsillos de
la población más de 150 mil millones de pesos sólo por nuevos impuestos.
Otro de los nuevos engaños, de
ese par autocrático, lo expuso la presidente: “¿Por qué tenemos que seguir
rescatando a PEMEX?; por esa terrible deuda que adquirieron Calderón y Peña.
¡Increíble! ‘Deuda corrupta y maldita’ de 250 mil millones de pesos.”
Pero, en materia de deuda
pública, interna y externa, de México, tenemos que con el presidente Zedillo
fue de 913 mil millones de pesos; con el presidente Fox subió
a 3 billones de pesos; con el presidente Calderón llegó a 4 billones de pesos;
con el presidente Peña quedó en 7 billones de pesos; pero con el presidente
López Obrador se elevó a 15 billones de pesos; y en sus primeros diez meses la
presidente Sheinbaum lo incrementó hasta 18 y medio billones de pesos.
Compare los 250
mil millones de pesos de Calderón y Peña, con los más de 11 billones de pesos
de Sheinbaum y López.
Son centavitos los
de Calderón y Peña, frente al dineral billonario de Sheinbaum-López.
Ninguna “deuda”,
señora presidente, es “corrupta” ni “maldita”; primero, porque estos dos
adjetivos no corresponden lógicamente al sustantivo “deuda”, que sólo es una
cosa, un simple objeto; mientras que los corruptos y los malditos deben ser
humanos, bastante deshumanizados debido a sus actos criminales; segundo, ni
jurídica ni éticamente tiene Usted facultades para denostar a ninguna persona,
menos en una de esas mañaneras que los mexicanos pagamos para que nos
desinforme, a cambio de que su ego imperioso crezca; y, tercero, el historial
objetivo y oficial de la deuda pública neta de nuestro país indica que el dúo
Sheinbaum-López está por quintuplicar la deuda de Calderón, y por cuadruplicar
la deuda de Peña, dando la pareja del obradorato mayores señales de corrupción,
y nadie, aún, los ha maldecido.
Una engañifa más
del lenguaje mañanero de la presidente se observa cuando afirma: “Nosotros
siempre combatimos la corrupción, esté donde esté, no debe haber ningún recurso
público que llegue al bolsillo de un gobernante de manera malhabida.”
Cuando la
presidente formal dice “nosotros”, ¿a quiénes se refiere?
Lo más seguro es
que se trate de la pareja presidencial Sheinbaum-López; y la forma
inconstitucional como están actuando es, de por sí, una corrupción aberrante.
Y afirmar que
ellos siempre combaten la corrupción, es una enorme mentira, puesto que la
corrupción está en ellos mismos. ¡Ellos son la corrupción!
Más aún, cuando
todos los recursos públicos llegan a los bolsillos de sus cómplices preferidos,
y de forma malhabida.
Acaba de venir a
Michoacán la presidente, como parte de su gira nacional, y exhibió sus mentiras
empobrecidas. Sus temas fueron repavimentaciones y bacheos, repitiendo que son
35 mil millones y medio de pesos el monto del bienestar compra votos; y lo único
que puede cimbrar al mundo son los alcances criminales del huachicol fiscal,
que ya ha ocasionado la muerte de 7 implicados, y les sigue explotando en su
propia cara.
“Con el pueblo
todo”, hasta los cárteles narco, incluyendo el de la barredora, del que algo
saben el ex secretario de gobernación Adán Augusto López, y López Obrador.
“Sin el pueblo
nada”, como el caso del huachicol fiscal, del que algo saben el ex secretario
de marina Rafael Ojeda Durán, y López Obrador.
A la cárcel los
corruptos, gritan con demagogia los acuatados presidentes mexicanos
Sheinbaum-López.
Y… ¿quién de los
dos va a cerrar la reja?
Creo que lo están
pensando todavía.