No es la primera ocasión, ni
será la última, para desgracia de todos. El Presidente Barack Obama ha dicho
que "es un incidente aislado", pero no, es un hecho constante,
repetitivo, y muy doloroso.
Los ejércitos en guerra lo
generan por la propia naturaleza de sus acciones bélicas. Matar a seres humanos
asiduamente no es poca cosa, y termina por trastornar a los miembros de las
partes contendientes.
La reciente noticia es
únicamente un eslabón más de una cadena interminable de locuras beligerantes
que arrasan a los pueblos a través del asesinato masivo, para hacer más ricos a
los mercaderes de la guerra.
Que Obama ofrezca condolencias
al Presidente afgano, Hamid Karzai,
no resuelve en nada la desgracia de aquel país que sigue siendo masacrado de
muy diversas formas por el ejército invasor gringo.
El atentado en contra de civiles, a manos
de un militar estadunidense, dejó 16 cadáveres, nueve de ellos niños,
prendiendo fuego a sus cuerpos antes de marcharse, sin que se conozcan las razones detrás del
ataque ni el nombre del soldado enloquecido. Sólo se ha dicho que es un
"sargento de plantilla".
El hecho se dio en la provincia de
Kandahar, cuando el sargento yanqui salió de su base en las primeras
horas de la madrugada del domingo próximo pasado, y procedió a ingresar en varias
casas, donde indiscriminadamente disparó contra sus ocupantes, dejando ese
trágico saldo.
Para después,
despreocupadamente, retornar a su cuartel, dando parte oficial de su hazaña.
Recordemos que en Afganistán subsiste una grave tensión después de la quema de
copias del Corán en una base militar estadunidense que desató una ola de
acciones contra tropas de la OTAN, dejando hasta el momento 30 civiles afganos y 6 soldados
estadounidenses muertos.
¿Cómo investigar para esclarecer
los hechos, si son propios de una guerra injusta e innecesaria?, por más que el
Presidente Obama se sienta "profundamente entristecido" por el hecho.
Las reacciones furiosas por
parte de invadidos e invasores pronto se van a sentir. El sentimiento antiestadunidense está
en sus más altos niveles.
El
teniente general Adrian Bradshaw, comandante a cargo de las fuerzas de la OTAN,
dijo que era incapaz de "explicar la motivación detrás de actos tan
crueles" y añadió que "nuestros pensamientos y oraciones están con
los afectados por esta tragedia".
Pero, antes, se había conocido un video
donde aparecen marines de Estados Unidos orinando sobre cadáveres de afganos.
Todo esto es verdadero terrorismo por parte de las fuerzas armadas de nuestros
vecinos del norte, y debe hacernos reflexionar sobre lo que puede ocasionar la
guerra en cualquier pueblo del mundo, incluyendo al nuestro.
Y en una conflagración de esa naturaleza, a
la par que los militares enloquecen, éstos hacen que se enloquezcan todos los
humillados por sus actos violentos.
La paz, no hay duda en ello, es nuestro
mejor patrimonio, más cuando va acompañada de libertad y de justicia.